Como si de una nueva revolución industrial se tratase, la logística 4.0 apuesta por la digitalización, la hiperconectividad y la automatización de los procesos para ganar rapidez y eficacia. Nos encontramos ante un mercado cada vez más competitivo y con un cliente cada vez más exigente, donde las empresas industriales y logísticas están afrontando una profunda transformación digital para ser más competitivas.
En este proceso de transformación digital, la incorporación de Inteligencia Artificial y Big Data será la clave para marcar la diferencia frente a la competencia, y la tecnología de vídeo se está postulando como una de las tecnologías más adecuadas para conseguir este cometido.
Este artículo tiene como objetivo abordar algunas de las múltiples aplicaciones de uso que la tecnología de vídeo puede aportar en el sector industrial y logístico para lograr la excelencia empresarial.
Videovigilancia: protección física y lógica
Hasta ahora, la finalidad principal de los sistemas de videovigilancia era garantizar la protección física de cualquier instalación. La seguridad de los centros de distribución depende de varios factores: el tipo de mercancías almacenadas, su ubicación geográfica, los puntos de acceso del personal interno y externo y el número de personal que requiere ciertos niveles de acceso, con elevados niveles de ciberseguridad.
Los sistemas de videovigilancia deben valorar todos estos factores para garantizar que la seguridad funciona eficazmente según todas sus necesidades y asegurar que las mercancías están seguras y protegidas. Pero además el sistema deberá contar con las herramientas necesarias para protegerse contra amenazas físicas y cibernéticas.
Sistemas de videovigilancia
Hoy, más allá de la seguridad, la integración del sistema de videovigilancia con cualquier software o sistema de gestión abre un mundo de posibilidades a las empresas del sector industria y logístico. Esta convergencia permite que las empresas puedan «poner ojos» a cualquier eslabón de la cadena de suministro y reducir los tiempos de resolución de incidencias, optimizar los procesos, garantizar la trazabilidad de las mercancías, localizar los activos móviles a través de avanzados y altamente precisos sistemas de geoposicionamiento, gestionar flotas de vehículos con sistemas de video embarcados y un largo etcétera.
La tecnología de vídeo ofrece un sinfín de posibles soluciones para resolver las problemáticas actuales y futuras de un sector que busca la ventaja competitiva a través de la apuesta en tecnología.
En definitiva, el vídeo inteligente impulsará la digitalización y automatización de los procesos que podrán ser administrados bajo un mismo sistema de gestión.
Supervisión de procesos
La supervisión de operaciones y procesos mediante cámaras de videovigilancia garantiza el cumplimiento de los protocolos establecidos en cada proceso de picking, estiba, etc. A través de las imágenes, los usuarios son capaces de identificar ineficiencias, malas praxis y establecer procedimientos de mejora continua.
La incorporación de Inteligencia Artificial en el vídeo permite tener un sistema predictivo capaz de detectar un incidente (parada o avería de una máquina) y alertar en tiempo real al centro de control para resolver la incidencia en el menor tiempo posible, minimizando las pérdidas económicas y personales.
Trazabilidad de mercancías
Los sistemas de vídeo pueden monitorizar los procesos automáticos de clasificación y capturar junto a las imágenes la información asociada a cada mercancía (número expedición o de tracking, origen, destino, dimensiones).
Ante una incidencia, el usuario puede realizar búsquedas por los metadatos recogidos a través de herramientas de Business Intelligence, visualizar el recorrido de cada una de las mercancías y localizar el momento exacto en el que se originó la incidencia mediante un acceso rápido y directo a una comprobación visual del vídeo grabado.
Activos en movimiento
La integración de los sistemas de CCTV con sistemas de geolocalización en interiores facilita el seguimiento y la localización de activos en continuo movimiento (pallets, toros mecánicos, operarios) en tiempo real y con la máxima precisión.
El sistema es capaz de enviar avisos automáticos en caso de que invadan un área restringida o de peligro y recoger información y estadísticas de cada activo para medir su productividad, su nivel de actividad y velocidad, e incluso conocer distancias, zonas recorridas e incluso el tiempo medio de permanecía por área.
Monitorización de la flota
Los actos delictivos realizados por bandas organizadas («loneros», «surferos», «Caballo de Troya», etc.) e incluso en ocasiones por los propios conductores tentados de sustraer las mercancías que transportan, convierten al transporte en el eslabón débil de la cadena. De ahí la importancia de detectar, prevenir y evitar en tiempo real estas amenazas.
La instalación de sistemas de vídeo embarcados en el transporte permite visualizar en tiempo real y grabar las imágenes procedentes de cualquier vehículo, a la vez que hacen posible la descarga automática del vídeo sobre un almacenamiento centralizado vía 3G/4G/Wi-Fi con seguridad de transmisión de datos garantizada.
Es posible conocer la posición GPS en tiempo real de los vehículos, el histórico de las rutas realizadas e incluso avisar en tiempo real mediante alarmas en caso de que el transporte se desvíe de la ruta, salga de su área de influencia o exceda los límites de velocidad.
Videovigilancia y ‘Big Data’
Los datos se están convirtiendo en el petróleo del siglo XXI. Una materia prima que, cuando se extrae, refina y distribuye, se convierte en la base de la Inteligencia Artificial y, por tanto, en el motor de la transformación digital en la era de la cuarta Revolución Industrial.
La irrupción del IoT (Internet of Things), la mejora de las comunicaciones, el uso de dispositivos conectados y el abaratamiento de los sensores, permitirán tener acceso a una abrumadora cantidad de información que solo tendremos capacidad de analizar y procesar gracias al uso de la Inteligencia Artificial.
La incorporación de Inteligencia Artificial en los sistemas de vídeo los convertirá en una herramienta transversal y necesaria para cualquier compañía. Solo aquellas empresas que apuesten por la tecnología lograrán una ventaja competitiva, con beneficio no solo para los departamentos de seguridad, sino también para los departamentos de negocio, operaciones, recursos humanos, prevención de riesgos laborales, finanzas, etc.