Con motivo de los atentados terroristas del 11 de septiembre del 2001, la seguridad sufrió un antes y un después con respecto a la seguridad y a sus formas de protección. A raíz de tal horrible suceso, España, al igual que otros países, desarrolló una serie de planes de protección para las infraestructuras críticas y que se refrendó en la actual Ley 8/2011, de 28 de abril, donde en el artículo 14 se establecen medidas para la protección ante amenazas que puedan sufrir los 12 sectores estratégicos, y concretamente, tiene una especial sensibilidad el transporte aeroportuario.
La formación es la piedra angular para alcanzar el éxito en los servicios que prestamos desde Iman Seguridad. Para ello contamos con planes de formación específicos para todos los sectores de actividad donde participamos, pero, especialmente en las infraestructuras críticas, la formación es clave.
Los aeropuertos y las instalaciones de navegación aérea designados como infraestructuras críticas conforme a la Ley 8/2011 de 28 de abril y al Real Decreto 704/2011 de 20 mayo, y los programas de seguridad aprobados conforme a lo dispuesto en la Ley 21/2003 de 7 de julio de Seguridad Aérea, se considerarán como Planes de Protección Específicos.
El Programa Nacional de Seguridad para la Aviación Civil, (PNS), establece la organización, métodos y procedimientos necesarios para asegurar la protección de los pasajeros, tripulaciones, público, personal de tierra, aeronaves, aeropuertos y sus instalaciones frente actos de interferencia ilícita.
Se entiende por interferencia ilícita todos aquellos actos o tentativas que pueda poner en riesgo a la seguridad de la aviación civil y el transporte aéreo.
El PNS contempla, en su capítulo 11, la formación obligatoria que deben realizar los equipos de seguridad que trabajan en ámbitos aeroportuarios donde se especifica la tipología de los diferentes módulos formativos en función a los puestos/operatividad que desarrollan los vigilantes de seguridad en los propios aeropuertos.
Los servicios de seguridad en ámbitos aeroportuarios considerados como infraestructuras críticas deben realizar los cursos específicos de “Seguridad aeroportuaria” y de “Servicios de vigilancia en instalaciones nucleares y otras infraestructuras críticas”
Así mismo, esta formación AVSEC (Aviation Security), se encuentra desarrollada en el Programa Nacional de Formación para la Aviación Civil (PNF), y en su Anexo F-SP – requisitos formativos para el personal de Seguridad Privada- , que establece las obligaciones en materia de formación para garantizar que todo el personal tiene conocimientos para aplicar, de forma efectiva, las medias de seguridad establecidas en el PNS, donde los vigilantes de seguridad deberán obtener las diferentes certificaciones AVSEC:
- Certificación C1: seguridad aeroportuaria. Duración del certificado 5 años.
- Certificación C2: inspección mediante equipo de Rayos X de equipaje de mano, objetos transportados, equipaje de bodega, provisiones de a bordo y suministros. Duración del Certificado 3 años. Se debe realizar un curso de refresco semestral mediante un simulador del escáner aplicado a dicha materia.
- Certificación C3a: inspección de la carga y correo. Duración del certificado 5 años.
- Certificación C3b: inspección de la carga y correo mediante equipos de Rayos X. Duración del certificado 3 años. Se debe realizar un curso de refresco semestral mediante un simulador del escáner aplicado a dicha materia.
- Certificación C4a: equipo canero y perro detectores de explosivos para inspección de carga y correo. Validez máxima de 1 año.
- Certificación C4b: equipo canero y perro detectores de explosivos para inspección de provisiones de a bordo y suministros del aeropuerto. Validez máxima de 1 año.
A partir del día 20 de octubre de 2020, la Dirección de la AESA aprueba el nuevo procedimiento de Certificación-Recertificación C1, C2, C3a y C3b donde todos los vigilantes deberán examinarse a través de la propia AESA para obtención de la certificación correspondiente.
Una vez superado el examen de certificación, los vigilantes de seguridad se someten a unas tutorizaciones específicas a modo de prácticas de servicio, donde deberán demostrar su capacitación formativa/práctica en el puesto de trabajo.
A la formación AVSEC, hay que sumar la formación específica que rige la Legislación de Seguridad Privada, siendo una parte esencial en los equipos de seguridad privada, debido a las diferencias operativas que se producen según la tipología de cada servicio de seguridad. Desde la entrada en vigor de la Orden de Interior Orden INT/318/2011, de 1 de febrero, sobre personal de seguridad privada, establece en su artículo 8, que los servicios de seguridad que se citan en el anexo IV de la propia Orden, sea necesario una mayor especialización del personal que los presta y en este caso, los servicios de seguridad en ámbitos aeroportuarios considerados como infraestructuras críticas deben realizar los cursos específicos de “Seguridad aeroportuaria” y de “Servicios de vigilancia en instalaciones nucleares y otras infraestructuras críticas”. En el caso, que el vigilante de seguridad fuera canero, también se incluiría el curso específico de “Servicios de vigilancia con perros”.
Sin duda, el sector de la seguridad privada está muy reforzado en su ámbito aeroportuario donde los vigilantes no solo deben pasar por unas pruebas de examen cada cierto tiempo, sino que, además, se actualizan continuamente en los procedimientos operativos y se incluyen en las diversas formaciones que realizan para la obtención de los certificados AVSEC correspondientes y la formación específica establecida en la legislación de seguridad privada.
Una vez que las formaciones se han realizado, se requiere que los procedimientos operativos estén correctamente diseñados y que todos los vigilantes se encuentren adecuadamente informados. En Iman Seguridad dotamos a estos vigilantes de un dispositivo móvil en el que se pueden consultar las operativas recién actualizadas a través de una aplicación que se encuentra conectada permanentemente con nuestro centro operativo de seguridad.
En consecuencia, esto conlleva una mayor profesionalización del sector de la seguridad aeroportuaria en todos sus términos, y que el nivel de exigencia sea mucho mayor para todos los que participamos en la labor de seguridad en los aeropuertos.