En un país avanzado, la seguridad es una actividad imprescindible para garantizar la integridad y el bienestar la población. El sector de la seguridad consta de dos grandes áreas: la seguridad pública y la seguridad privada. Las dos comparten el objetivo principal, que es proteger a las personas y a los bienes, pero entre ambas hay varias diferencias básicas.
Sector Seguridad: dos áreas con un destino común
- Seguridad Pública. Depende del Estado y en cada país la desempeñan las fuerzas de seguridad correspondientes, tales como la Guardia Civil y Policía Nacional en España. Estos cuerpos tienen como función proteger la vida, la libertad, la propiedad y los derechos de las personas. Y detentan el poder y la autoridad para hacer cumplir la ley y mantener el orden público.
- Seguridad Privada. La realizan las empresas especializadas, con el fin de proteger a las personas y las propiedades relacionadas con el sector corporativo y la ciudadanía de un país, sin descartar su actividad en organismos y ceremonias públicas. La extensa gama de tareas profesionales incluye la protección de empresas, hogares, locales comerciales y eventos. En general las empresas de seguridad privada ofrecen servicios tales como la vigilancia, el control de accesos, la seguridad en eventos y la protección personal.
Diferencias entre la Seguridad Pública y la Seguridad Privada
1) Finalidad. Una de las principales diferencias es que la pública está consagrada a garantizar de manera permanente la seguridad de la población de un país. La privada se centra de manera principal en proteger a los usuarios, clientes o bienes relacionados con un contrato de servicios de seguridad (privado o público).
2) Rango de autoridad. La pública cuenta con el respaldo del Estado de manera incondicional y sin reservas, mientras que la privada no tiene el mismo rango de autoridad y poder.
3) Capacidad de actuación. Los guardias de seguridad privada no pueden realizar determinadas funciones como interrogar ni retener documentación personal, teniendo que poner de manera inmediata a los delincuentes o sospechosos a disposición de las fuerzas de seguridad pública correspondientes.
4) Regulación. En el marco de la seguridad privada española, las pautas las marca una regulación que exige unas determinadas condiciones, dado que en última instancia el funcionamiento del sector de la seguridad privada lo controla el Ministerio del Interior. Es decir, la seguridad pública se regula a sí misma, mientras que la privada está supervisada por la pública.
5) Formación. En España los agentes de seguridad pública reciben su formación a bajo la responsabilidad del ejército (Guardia Civil) y del ministerio de Interior (Policía Nacional). En nuestro país los vigilantes de seguridad deben estar registrados y autorizados por el Ministerio del Interior mediante la Tarjeta de Identificación Profesional (TIP). De nuevo, el ramo privado de la seguridad se halla bajo el paraguas público.
Coordinación entre Seguridad Pública y Privada
En aras de una mejor protección de la ciudadanía, es frecuente que la seguridad pública y la seguridad privada trabajen de modo conjunto. En numerosas circunstancias, ambas se complementan y operan unidas para reforzar la seguridad de un espacio, zona o acto. La coordinación efectiva entre ambos ramos del sector puede mejorar el funcionamiento y los resultados de los servicios de seguridad, reduciendo el peligro y el número de incidentes.
Como hemos visto, las dos áreas principales que componen el sector de la seguridad en España son la pública y la privada, marcadas por ciertas diferencias en sus características y regulaciones. Ambas son indispensables para garantizar la integridad y el bienestar de la población y la protección de sus bienes. La colaboración entre ambas es habitual a fin de maximizar la eficacia integral de los servicios de seguridad.
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