El contexto de violencia global nos hace plantearnos casi a diario si nuestro país es capaz de defenderse militarmente. ¿Qué poderío militar tiene España? En la jerarquía de la OTAN, ocupa un séptimo nivel. Es decir, que en el ranking de poder de la Alianza Atlántica, puntúa alto. En la pirámide europea tiene una cuarta plaza, sobrepasada solo por Italia, Francia y Alemania.
Todos sabemos que España no es ya el gran dominio imperial que fue hace siglos, pero nuestro ejército se haya entre los más poderosos del mundo. En 2024 figuramos como fuerza militar notoria, afianzada entre las 20 primeras potencias.
Esto lo reconfirma el último informe de Global Fire Power del año 2024 sobre la capacidad defensiva de 145 países del planeta. El índice GFP evalúa 60 factores para calcular la puntuación, desde la dotación humana de cada ejército hasta los componentes de armamento funcionales, incluyendo las particularidades logísticas y territoriales.
Este análisis exhaustivo, basado en más de 60 factores, presenta una visión detallada de la capacidad militar de 145 naciones. España rebasa el anterior puesto 21 y ostenta el puesto 20 mundial, mostrando un impulso ascendente respecto a 2023. El índice GFP la ubica detrás de Alemania y por delante de Polonia, marcando un avance palpable en la coyuntura militar global. Destaca el hecho de que un país con capacidad militar comparable sea Israel, junto a Australia y Arabia Saudí.
Pero España sigue sin cumplir los objetivos de la OTAN en 2024
La OTAN sacó en julio de 2023 sus proyecciones sobre el gasto en Defensa de los aliados. En ese documento España mantenía su posición como país occidental muy rezagado en cuando a desembolso militar, como tercer país con menor aportación a la Alianza, junto con Bélgica y Luxemburgo. El año pasado un cálculo optimista de la organización militar aventuraba que nuestro país invirtiera el 1,26 por ciento del PIB en Defensa, situado en tercera posición empezando por el final.
Pero ese vaticinio no solo se cumple, sino que empeora. Este año España vuelve a quedarse corta en la contribución económica que marca la OTAN. La Alianza indica que nuestro país está en ese antepenúltimo lugar, pero reduce el porcentaje del PIB que comparte España hasta un 1,24 por ciento. Este dato y la inexistencia de presupuestos para 2024 alejan más si cabe el objetivo del 2 por ciento del PIB. Los países aliados se comprometieron a ello para este año. España se demora hasta 2029.
Quien metió a España en la Alianza Atlántica
Como explica el Ministerio de Asuntos Exteriores en su página web, el proceso de incorporación de España a la Alianza Atlántica se puso en marcha tras el discurso de investidura del presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, el 25 de febrero de 1981. Es decir, hace casi 45 años. El referéndum sobre la continuidad de España en la OTAN se celebró el miércoles 12 de marzo de 1986 con alcance nacional. Nuestro país pertenecía a la OTAN desde el 30 de mayo de 1982. Lo convocó el 31 de enero de 1986 el gobierno del PSOE presidido por Felipe González.
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