En un contexto donde las amenazas digitales y físicas evolucionan a gran velocidad, el sector de la seguridad enfrenta el desafío de reinventarse para garantizar la protección de infraestructuras, personas y datos. De cara a 2025, i-PRO señala cuatro predicciones para el mercado de la seguridad física en 2025: el papel transformador de la inteligencia artificial (IA), la computación en el borde, la expansión de la computación en la nube y la integración eficaz de datos masivos.
Estas innovaciones no solo prometen una mayor eficacia operativa, sino que también marcan el inicio de un cambio hacia enfoques proactivos y personalizados en la seguridad, exigiendo un compromiso ético para equilibrar tecnología y privacidad. A medida que los sistemas de seguridad avanzan hacia la inteligencia descentralizada y soluciones más eficientes, el sector se prepara para una nueva era donde las predicciones para el mercado de la seguridad física en 2025 como la IA y la computación en el borde serán pilares fundamentales en la toma de decisiones estratégicas y operativas.
IA en el borde, seguridad proactiva y ética
En primer lugar, el procesamiento en el borde de los análisis basados en la IA está transformando rápidamente el panorama de la seguridad al permitir a los sistemas ir más allá de las respuestas reactivas para adoptar enfoques proactivos y preventivos. Este cambio permite a las organizaciones hacer frente a los incidentes antes de que se agraven, mejorando tanto la seguridad como la eficacia operativa. Sin embargo, el desarrollo y despliegue de la tecnología de IA debe equilibrar la innovación con la responsabilidad. El uso ético, la protección de la intimidad y la transparencia serán esenciales a medida que los datos recopilados se integren cada vez más en los sistemas empresariales y las soluciones de seguridad.
En 2025, el papel de la IA en el borde dentro del sector de la seguridad se profundizará, con algoritmos avanzados que permitirán la detección de amenazas en tiempo real, capacidades de aprendizaje in situ y el inicio de conocimientos contextuales que permitan a los operadores actuar antes de que se produzcan incidentes.
Integración de datos y decisiones clave como predicciones de seguridad física en 2025
En cuanto a la segunda predicción, las cámaras y los sistemas de seguridad modernos con IA pueden generar un volumen de datos abrumadores. El reto para 2025 no será solo recopilar más datos, sino filtrarlos e integrarlos de manera eficaz. La IA desempeñará un papel fundamental al resumir y contextualizar la información, lo que ayudará a los operadores a centrarse en los datos procesables. Aunque la IA puede sugerir líneas de actuación basadas en patrones de datos, los responsables humanos de la toma de decisiones seguirán siendo fundamentales para interpretar y aplicar estos conocimientos.
«La integración de datos también será fundamental. Los sistemas de seguridad deben ir más allá de las soluciones aisladas para ofrecer un flujo de información fluido entre dispositivos y plataformas», comentó Gerard Figols, director de producto de i-PRO. «Las herramientas de visualización garantizarán que los datos se presenten de forma intuitiva, lo que permitirá a los operadores tomar decisiones informadas con rapidez. Será más importante que nunca combinar estos potentes dispositivos de computación en el borde con un sistema de gestión de vídeo compatible para interpretar la gran cantidad de datos disponibles».
El equilibrio adecuado entre computación en el borde y nube
Aunque la computación en la nube seguirá ofreciendo flexibilidad y escalabilidad, el aumento de los costes y los problemas de latencia harán que se preste una atención renovada al papel de la computación en el borde. Al procesar los datos localmente (dentro de la cámara), la computación en el borde reduce la dependencia de la infraestructura y los recursos informáticos de la nube, al tiempo que mejora los tiempos de respuesta y la precisión de los datos al eliminar las pérdidas por compresión.
Por ello, la tercera predicción es relativa a los nuevos avances en chipsets, como los de Ambarella, que están a punto de desbloquear las capacidades de IA generativa en el borde, lo que supone un importante paso adelante en las aplicaciones de IA personalizadas y descentralizadas. La IA generativa permitirá a los sistemas anticipar y simular mejor las amenazas potenciales. Las funciones y el rendimiento que anteriormente solo eran posibles en la nube o en servidores potentes, como el reconocimiento de escenas más complejas, la conversión de texto y la búsqueda que utiliza entradas de texto directas para los análisis ejecutados en el borde, permitirán a los integradores construir sistemas de menor consumo y que sean más seguros y rentables.
Como última predicción de I-PRO, a medida que las capacidades de IA se expanden, el sector debe priorizar las prácticas éticas y las medidas de ciberseguridad sólidas.
Archivado en: