Las infraestructuras críticas requieren una protección perimetral de muy alta fiabilidad. Como consecuencia de los estándares internacionales de homologación, podemos encontrar soluciones eficientes y fiables para la protección de este tipo instalaciones, que son, además, flexibles y de fácil instalación.
Un sistema de protección perimetral eficaz debe ser capaz de detectar los accesos y/o movimientos no permitidos alrededor del perímetro, así como de filtrar todos aquellos fenómenos meteorológicos y elementos que pueden producir alarmas no deseadas en el centro de control, como por ejemplo lluvia, viento, niebla, movimiento de vegetación o animales. Si hablamos de grandes perímetros, debemos añadir a esta lista de requisitos los debidos a la mayor longitud del perímetro, el cual dificulta el tiempo de respuesta de los vigilantes. Es necesario incluir un sistema capaz de incrementar el tiempo de respuesta, detectando la intrusión no autorizada de personas o vehículos al perímetro con mayor antelación y, por lo tanto, con distancias de detección muy superiores a las habituales; pero sin perder la fiabilidad y eficacia de la solución.
Como hemos visto, cada instalación, especialmente en las infraestructuras críticas, tiene unas necesidades específicas basadas en sus factores de riesgo y en las características del perímetro a proteger. En función de estas emplearemos diferentes soluciones y tecnologías de seguridad para conseguir una protección óptima.
Tecnología radar
Los sistemas de protección perimetral basados en tecnología radar sirven para realizar una detección perimetral de intrusión por vía terrestre, aérea y marítima de personas o vehículos. Y también para detectar intrusiones de drones, basándose para ello en la información proporcionada por el radar y en los algoritmos de Inteligencia Artificial que permiten discriminar el tipo de objetivos que queremos detectar.
Se trata de una solución fundamental para la detección y seguimiento de intrusiones en grandes áreas. Proporciona una detección anticipada a grandes distancias y respuestas avanzadas a través de alarmas automatizadas. La tecnología radar de vanguardia identifica la posición GPS y el tipo de intrusión alrededor de la instalación, el cual, utilizando como apoyo un sistema de videovigilancia con cámaras PTZ, permite verificar en tiempo real el origen de la intrusión de forma precisa y anticipada. De esta manera se aumenta el tiempo de respuesta de los vigilantes ante un ataque real.
Se trata de una solución muy adecuada en instalaciones con determinados factores de riesgo. Por ejemplo, en las prisiones, en las que a medida que se presentan nuevas amenazas, las soluciones de seguridad deben adaptarse a las nuevas tecnologías. El contrabando siempre ha sido una amenaza para las prisiones a nivel global y los métodos para acceder a ellas han evolucionado con el tiempo. La tecnología de drones, responsable de una gran cantidad de estos problemas, cada vez más dañinos, está haciendo que algunas soluciones de seguridad no abarquen este tipo de intrusiones. Gracias a la tecnología radar, al percibir el movimiento aéreo se lleva a cabo una detección precoz en caso de aproximación de drones, lo que permite actuar con inmediatez; incluso poniendo en marcha una contramedida para inhibir el dron antes de que llegue a sobrevolar el perímetro interno.
Este tipo de solución de protección perimetral permite la integración en soluciones software tipo VMS o PSIM, haciendo posible una gestión integral eficaz de los sistemas de seguridad empleados en dichas instalaciones críticas.
Protección de vallados
Las soluciones de protección de vallados tienen como objetivo evitar los accesos no autorizados antes de que el intruso traspase una barrera física (vallado) y acceda al área protegida. Existen diferentes soluciones y diversas tecnologías. Son sistemas que detectan intentos de corte, ruptura y escalada, tanto en vallas flexibles como en rígidas.
Tienen una alta inmunidad a perturbaciones atmosféricas y ambientales, y funcionan de manera óptima con carreteras o vías de ferrocarril que estén próximas al vallado. Además, se tratan de protecciones seguras compatibles con vegetación trepadora perenne.
La instalación de estos sistemas se realiza a través de elementos pasivos, cuya “inteligencia” está en un analizador o controlador periférico autoprotegido. Este dispositivo se comunica con el centro de control mediante comunicaciones IP supervisadas y encriptadas, maximizando la seguridad frente al vandalismo o intentos de corte de la comunicación.
Análisis de vídeo
Actualmente, el videoanálisis es una tecnología ampliamente implantada en el sector de las infraestructuras críticas. El análisis de vídeo permite generar alarmas a partir de las imágenes de las cámaras de seguridad. Los sistemas analizan el contenido de dichas imágenes y generan una alerta cuando se detecta una intrusión o un acceso no permitido al perímetro. Son sistemas de videovigilancia automática que, además, han reducido el número de falsas alarmas causadas por animales, árboles, lluvia, etc., gracias a la implantación de la tecnología Deep Learning.
Al ser sistemas de alarma basados en CCTV permiten cubrir grandes superficies con pocos sensores. De esta forma se consigue un ahorro económico en material, costes de obra civil y mantenimiento. Permiten aprovechar las cámaras de CCTV ya existentes y eliminan la obligación de comprar cámaras de un fabricante determinado.
El software posibilita una gran personalización dependiendo de los requerimientos de la instalación. Por ejemplo, permitiría el tránsito de personas en un área y generar una alerta en caso de que transite un vehículo, o viceversa.
Detección geosísmica
Se trata de un sistema de seguridad perimetral muy eficiente. Crea una faja de detección completamente invisible y no identificable que, según las exigencias del perímetro, puede proteger todo el perímetro exterior o zonas de acceso específicas.
El sistema utiliza sensores geosísmicos que se entierran a unos 60 centímetros de profundidad. Estos sensores perciben las ondas sísmicas causadas en el suelo por los pasos o el movimiento de una persona o vehículo. Dispone de un sistema de doble validación de la actividad, evitando falsas alarmas de eventuales perturbaciones ambientales.
Se trata de sensores pasivos inmunes a averías eléctricas o electrónicas. Su cable de interconexión está fabricado con una armadura que le hace inmune a roedores. Gracias a su elevada robustez y a la falta de componentes electrónicos activos, los sensores no requieren ningún mantenimiento periódico.
Las líneas de detección se adaptan fácilmente a la conformación del terreno y al recorrido del perímetro, permitiendo seguir pendientes y llanuras, así como evitar eventuales obstáculos.
Dependiendo del sistema, se puede instalar bajo diferentes tipos de substratos: tierra, césped, grava, asfalto y adoquines.
Centros de control
Además de la fiabilidad de los propios sistemas de detección perimetral, uno de los puntos fundamentales es dotar al centro de control de una solución software específicamente desarrollada para una gestión sencilla y eficaz de dichos sistemas.
Esta plataforma de gestión de seguridad (PSIM) ha de permitir la integración e interrelación de los distintos sistemas de seguridad con el fin de posibilitar a los vigilantes una supervisión y control eficiente de los mismos. Así se garantiza una vigilancia óptima y segura de la infraestructura crítica.
