La ciberdelincuencia es un fenómeno complejo y global que requiere un enfoque multidisciplinar. De hecho, es necesario conocerlo desde todos los puntos de vista para saber la realidad a la que nos enfrentamos. En este sentido, Alberto Francoso, jefe de la Sección de Análisis del Servicio de Ciberseguridad de la Oficina de Coordinación de Ciberseguridad (OCC), dependiente del Ministerio del Interior, presentó durante la celebración del foro SICUR Cyber el Estudio sobre Cibercriminalidad en España 2020. El representante público hizo un recorrido por las principales conclusiones obtenidas en este documento.
La primera y más importante, según recalcó durante su intervención, es que “el 90% de los ciberdelitos que se cometen tienen un fin económico, son para conseguir dinero de forma ilícita”, explicó. En otras palabras, “cambian los medios para obtenerlo, pero no los fines”, añadió.
Más conclusiones del Estudio sobre la cibercriminalidad en España
La siguiente conclusión es que la pandemia en 2020 aceleró el uso de tecnologías de la información, y con ello también se produjo un aumento de los ciberataques. De hecho, si en 2016 se denunciaron más de 70.000 ciberdelitos, en 2020 esa cantidad superó los 200.000. “Y esto son solo los ciberdelitos que se denunciaron, porque estimamos que el 80% de los ciberdelitos no se llegan a denunciar”, puntualizó Francoso.
El representante de la OCC apuntó, además, otro dato preocupante que se refleja en el citado estudio. Y es que en 2016 menos del 5% de los delitos que se cometían en España eran ciberdelitos. En cambio, en 2020 esa cifra se triplicó. “Si tenemos en cuenta que la cifra se multiplica por tres cada cuatro años, no resulta extraño que dentro de poco el número de ciberdelitos supere al de los delitos”, apuntó. Esto es así porque cometer ciberdelitos es muy sencillo por una serie de características. “Su atribución es muy difícil, resulta más barato, lo único que se necesita es un ordenador y una conexión a Internet, no requiere riesgos físicos…”, enumeró.
Por eso, según Francoso, es importante potenciar la ciberseguridad como forma de prevenir los ciberdelitos. Y es que, tal y como afirmó su intervención, “cuanto más ciberseguro sea un país, menos ciberdelitos tendrá”. De ahí la puesta en marcha de un Plan Estratégico de Cibercriminalidad por parte del Gobierno con el que se pretende impulsar la formación y especialización de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, mejorar el uso de herramientas tecnológicas de prevención y promover un marco legal adecuado para que la ciberseguridad se pueda desarrollar correctamente, entre otras acciones.
Archivado en: