El Gobierno de España ha reestablecido los controles de las fronteras terrestres en el marco las medidas de contención del coronavirus. El cierre ha entrado en vigor a las 00:00 horas del martes 17 y se prolongará durante todo el estado de alarma.
En particular, las autoridades solo permitirán la entrada a ciudadanos españoles, residentes, trabajadores transfronterizos y aquellos que acrediten documentalmente causas de fuerza mayor o situación de necesidad.
No obstante, queda exento el transporte de mercancías. Con ello, el Gobierno pretende asegurar la continuidad de la actividad económica y preservar la cadena de abastecimiento.
Esta medida tampoco afecta al personal extranjero acreditado como miembro de las misiones diplomáticas, oficinas consulares y organismos internacionales sitos en España. Siempre y cuando lleven a cabo desplazamientos vinculados al desempeño de funciones.
Según informan desde el Ministerio del Interior, esta decisión será comunicada a los organismos responsables de la Comisión Europea, al resto de Estados miembros de la Unión y a los Estados asociados a Schengen.
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