Patxi Blázquez, director de Seguridad Corporativa de Iberdrola para España y Portugal (que cuenta con más de 30 años de trayectoria profesional), explica cómo concibe la compañía su seguridad y cuáles son los principales retos que tiene por delante. “Desde el Departamento de Seguridad debemos ser capaces de adaptarnos a los nuevos tiempos, a las necesidades de la organización y actuar de acuerdo a la línea estratégica”, afirma al respecto.

El Ministerio del Interior llevó a cabo una reestructuración de su organización interna el año pasado en la que una de las principales novedades fue la creación de la Jefatura de Armas y Explosivos y Seguridad (JAES) de la Guardia Civil, donde se integró poco después el Servicio de Protección y Seguridad (hasta entonces dependiente de la Jefatura de Unidades Especiales y de Reserva). Un cambio que, lejos de ser ‘estético’, pretende situar dicho servicio en un escalón estratégico y elevar su nivel de interlocución, como señala el responsable de la JAES, el general Santiago Caballero. Para conseguirlo, de momento se están dando pasos como recuperar la figura del oficial de enlace con la Seguridad Privada en las comandancias, pero habrá muchas novedades más.

La forma en la que arden los bosques está evolucionando. El cambio climático, la sequía intensa, el abandono rural y el propio desarrollo de los incendios obligan a realizar modificaciones en las políticas y estrategias

Javier Montoya está a punto de cumplir un año como director de Seguridad de Aigües de Barcelona en el momento de esta entrevista, si bien lleva cerca de dos décadas dedicado al sector del Agua en diferentes empresas del Grupo Agbar. A lo largo de todo ese tiempo, este ingeniero técnico de telecomunicaciones ha desempeñado funciones relacionadas con las TIC, como Chief Technology Officer o responsable de servicios de Operation Technology; pero como él mismo aclara, ahora su ámbito es la seguridad sin distinciones, tanto lógica como física. No en vano, la integración es hoy una realidad en Aigües de Barcelona, una empresa estratégica de las más icónicas de Cataluña.

Las agresiones a facultativos son una de las principales preocupaciones de seguridad en los hospitales y centros de salud. Hasta tal punto que la Secretaría de Estado de Seguridad creó hace algo más de dos años, a través de la Instrucción 3/2017, la figura del interlocutor policial nacional sanitario, que en el caso de la Policía Nacional encarna el comisario Javier Galván. Este profesional y su equipo trabajan a diario para aplacar esta lacra dentro de la Sanidad española, pero también para abordar otros problemas importantes, como garantizar que se protege adecuadamente el material radiológico de uso médico que se almacena en algunos hospitales para evitar que caiga en malas manos o reducir en lo posible los frecuentes hurtos o robos con fuerza en estas infraestructuras.

La transformación digital ha supuesto un cambio en el rumbo de los servicios de seguridad, y ha dotado a las empresas de una herramienta en la que el dato pasa a ser el centro de las estrategias.