¿Cuándo se incorporó al mundo de la seguridad y cuál es su trayectoria en él?
Desde que empecé en el sector de la Seguridad hace 20 años hasta ahora he sido testigo de la transformación que se ha vivido hacia el mundo digital. Cuando comencé como técnico, pocos podían imaginarse que departamentos como Postventa, Desarrollo de Negocio, Preventa e Ingeniería iban a experimentar la evolución que se está viviendo en los últimos años. El haber trabajado desde los diferentes puntos de vista del negocio (distribución, instalación/integración y fabricante) me ha permitido tener una visión global del sector y de sus inquietudes en cada momento.
¿Cómo valora la incorporación cada vez mayor de las mujeres a la seguridad y su contribución al sector?
Como en cualquier faceta de la vida, la diversidad y la integración de diferentes perfiles enriquece y permite un crecimiento más global y competitivo. Creo que la mujer aporta un punto de vista diferente a la seguridad, aborda proyectos y soluciones con un nuevo enfoque y refresca aquellos puntos en los que el sector se había estancado.
Es necesario eliminar roles y estereotipos, así como repartir responsabilidades creando redes de trabajo colaborativo. De esta manera conseguiremos que todo el potencial, habilidades y talento de las personas ayuden a conseguir el mayor rendimiento y crecimiento del sector.
«El mundo de la seguridad es muy conservador y le cuesta absorber cualquier cambio o innovación tecnológica que se debe aplicar en las instalaciones»
Desde su punto de vista, ¿cuáles diría que son los principales retos a los que se enfrenta el sector de la Seguridad?
El principal reto es la innovación. El mundo de la seguridad es muy conservador y le cuesta absorber cualquier cambio o innovación tecnológica que se debe aplicar en las instalaciones. Cada uno de los grandes saltos tecnológicos que se han producido han supuesto años para ser adaptados y aceptados. Por ejemplo, el cambio de analógico a digital representó un cambio tecnológico impactante en el sector de la Seguridad. Se han necesitado muchos años para llevar a cabo su implantación, e incluso hoy en día siguen existiendo instalaciones analógicas.
Actualmente estamos viviendo una nueva revolución en el sector basada en la Inteligencia Artificial aplicada a la seguridad. La Seguridad 4.0 nos aportará una gran fiabilidad y cambio de paradigma. Hay que orientar los sistemas y soluciones para que sean más autónomos, con capacidad de pensar y de tomar decisiones por sí mismos. Pero todo cambio tecnológico lleva su tiempo y proceso de adaptación. Esta es la batalla que, como sector, tenemos que ganar lo antes posible.
¿Qué soluciones de seguridad adquirirán una mayor importancia en el devenir del segmento en el que opera su compañía?
Dentro de nuestra filosofía de Seguridad 4.0, en Casmar apostamos por la innovación y el valor añadido. Buscamos ofrecer la mejor solución adaptada a las necesidades del cliente e instalación y que, a la vez, incluya las novedades tecnológicas que permitan al sistema ser más fiable y a la instalación más amigable y autónoma.
Como he comentado, la Inteligencia Artificial es el nuevo concepto que aplicado al sector nos va a proporcionar instalaciones de seguridad inteligentes. ¿Qué mayor reto que nuestro sistema de seguridad piense y actúe como una persona? En esta línea es en la que trabajamos y apostamos en Casmar, por sistemas y soluciones que incluyan las nuevas tecnologías en el día a día de un sistema de seguridad tradicional.
