¿Qué iniciativas, medidas, experiencias o buenas prácticas ha puesto en marcha su compañía para contribuir a combatir la pandemia producida por el coronavirus COVID-19?
En Casmar hemos tomado medidas tanto internas, dirigidas a proteger a nuestro equipo, como externas, para apoyar a nuestros clientes y poder superar juntos esta crisis. Desde aumentar las medidas de higiene y seguridad hasta implementar el teletrabajo para aquellos puestos que por su naturaleza era posible y el trabajo por turnos en los que se requería presencia física en la empresa.También hemos limitado temporalmente el acceso a nuestras instalaciones para proteger a empleados y clientes.
La rápida adaptación y respuesta del equipo a las nuevas circunstancias y al uso de tecnologías ha sido ejemplar. Gracias a ello hemos sido capaces de seguir ofreciendo nuestro mejor servicio.
Por otro lado, hemos organizado un buen número de presentaciones online de soluciones, en colaboración con los fabricantes, así como cursos de formación técnica para compartir nuestro conocimiento y experiencia con nuestros clientes y colaboradores.
Además, asumimos los gastos de envío de todos los pedidos como forma de agradecimiento y ayuda hacia nuestros clientes.
Nuestro objetivo es superar esta pandemia juntos. Por ello, el compromiso con nuestro equipo, nuestros clientes y nuestros colaboradores es hoy más importante que nunca.
¿Cuál cree que debe ser la principal lección aprendida de esta crisis sanitaria desde la perspectiva de su sector?
El sector de la seguridad es esencial en el desarrollo de una crisis sanitaria como la que estamos viviendo. Ante las nuevas necesidades existentes, y que van surgiendo como consecuencia de la crisis, el sector tiene que adaptarse de manera rápida para poder ofrecer a los clientes las soluciones adecuadas. Se requiere, además, una gran labor de colaboración y compromiso entre las distintas empresas que componen la cadena de valor para asegurar el desarrollo, disponibilidad y funcionamiento de los sistemas de seguridad.
Hemos experimentado un claro ejemplo de que las compañías hemos de ser ágiles para poder afrontar cualquier eventualidad, por muy imprevista que pueda ser.
La vuelta paulatina a la normalidad es otro reto en el que vamos a tener que demostrar nuestra capacidad de reinvención. Esta crisis ha demostrado que la seguridad privada es un servicio esencial para la sociedad. Al final, la misión intrínseca de todos los que componemos este sector es garantizar la protección y el bienestar de la sociedad, entendida en su sentido más amplio.