¿Cómo calificaría el papel que están desempeñando los servicios de seguridad privada durante la crisis del COVID-19?
Nuestro papel está siendo de protagonista responsable. El enorme esfuerzo efectuado por las empresas y el personal como servicios esenciales ante el estado de alarma ha contribuido de forma clara a fortalecer el modelo de seguridad pública en nuestro país. Lo más importante es que los recursos de la seguridad privada se han puesto a disposición de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
¿En qué sentido podrían cambiar los servicios de seguridad privada a consecuencia de la pandemia?
Los servicios cambiarán en la medida que los usuarios demanden nuestras soluciones de seguridad y las empresas sepan adaptarse a dichos cambios. La pandemia pasará, pero la crisis económica continuará lamentablemente el próximo año. para esto no estamos preparados.
¿Cómo estima que afectará la emergencia del COVID-19 al negocio de las pequeñas y medianas empresas de seguridad privada?
Las pequeñas y medianas empresas llevamos años preparándonos y especializándonos para poder competir en un mercado cada vez más complejo. El esfuerzo y nuestras contribuciones a este sector no derivan de dicha emergencia sanitaria. Lo que sí precisamos es disponer de una regulación que nos proporcione seguridad jurídica y garantías de libre competencia.