Hanwha Vision mejora la capacidad de inteligencia artificial en sus cámaras de Serie P
Hanwha Vision ha mejorado las capacidades de la inteligencia artificial (IA) en sus cámaras de la Serie P. Las mejoras se han producido mediante WiseDetector, el protocolo MQTT, la detección de caídas y el conteo de vehículos y personas. Las nuevas funciones aportan mayor eficiencia a los sistemas de seguridad y amplían el alcance del vídeo.
Pread Um, director de Producto y Marketing de Hanwha Vision Europe afirmó que: «Las últimas mejoras en IA en las cámaras de la Serie P amplían aún más las posibilidades del vídeo, ofreciendo beneficios comerciales tangibles». Um también mencionó que los equipos de seguridad ahora tienen una manera más sencilla de rastrear emergencias, gestionar necesidades concretas y conectarse a IoT.
Detección de objetos y caídas
En este sentido, WiseDetector es una función que amplía todos los objetos que la IA puede detectar gracias al aprendizaje automático. El sistema puede detectar desde objetos predefinidos como personas o vehículos, hasta objetos específicos como chaquetas de alta visibilidad o conos de tráfico que bloquean una carretera.
Las cámaras de la serie P también emplean la IA para detectar si una persona se cae y se lesiona, generando alertas automáticas a los operadores. Esta detección mejora las condiciones de seguridad en almacenes, puertos, fábricas y otros puertos logísticos.
Conteo de Vehículos y personas
Además, las cámaras generan metadatos que realizan un conteo de personas y vehículos en tiempo real para la gestión de multitudes, como por ejemplo en estadios. Esta nueva función respalda ciudades más inteligentes ya que permite un flujo fluido de personas y tráfico y, contabilizar el número de vehículos en las carreteras y aparcamientos, puede ser de gran utilidad para los planificadores urbanos.
El protocolo MQTT
Por otro lado, el protocolo MQTT permite que las cámaras de la Serie P se conecten con multitud de dispositivos de IoT. Esto hace que las capacidades del sistema de vídeo se amplíen a ciudades inteligentes u operaciones comerciales.
En el caso de una ciudad inteligente, los sensores ambientales tienen la capacidad de alertar a los operadores ante una posible aparición de humo, todo ello con confirmación visual mediante cámaras. Estas mismas cámaras, también, pueden activar el encendido del alumbrado público como respuesta a los cambios climáticos. Por ejemplo, en un entorno de construcción, el aire acondicionado o la calefacción pueden encenderse automáticamente cuando entra una persona, aumentando así la comodidad de la zona.