Seguritecnia 401

7 SEGURITECNIA Octubre 2013 Editorial “Ser lo que soy, no es nada sin la Seguridad” (Shakespeare) E l nuevo Reglamento de Instalaciones de Protección Contra Incendios (RIPCI) se está haciendo esperar demasiado, pero cada vez está más cerca. Al menos eso parece después de que el Ministerio de Industria, Energía y Turismo haya enviado a las asociaciones del sector el borrador del Real Decreto que aprobará esta norma, cuya reforma comenzó hace más de cinco años. Desde entonces, los agentes dedicados a la protección contra incendios (PCI) esperan impacientes que se apruebe, de una vez por todas, un documento que está considerado como un paso fundamental para el desarrollo de esta actividad en España. La evolución técnica, normativa y legal que ha experimentado este segmento en los últimos años hacía más que ne- cesaria la revisión del RIPCI vigente, que se aprobó en el año 1993. Desde que Industria anunciara la renovación del texto hace un lustro, se han producido 19 revisiones que no han logrado que el ministerio, las comunidades autónomas y los agentes del sector terminen de ponerse de acuerdo. El borrador que acaba de pu- blicarse se acerca más al deseo de todos, lo que, de confirmarse, supondría un es- paldarazo para una actividad muy tocada por la caída trepidante de la construcción en nuestro país desde que comenzó la crisis. Sin embargo, hay que tomarlo con cierta cautela porque ya han existido anteriores borradores (el último de febrero de 2011) que no han salido adelante. El documento que se aprobó hace dos décadas, que establecía los requisitos mí- nimos que deben reunir los equipos, sistemas, instalaciones y mantenimiento de protección contra incendios, ha quedo obsoleto desde el punto de vista técnico y legal, pero también desde una perspectiva comercial. En la reforma del RIPCI, ade- más de una adaptación de las prescripciones técnicas a las necesidades actuales, subyace la idea de que contribuirá a garantizar una competencia limpia y las buenas prácticas, minimizando problemas como la venta de productos a bajo coste que no ofrecen plenas garantías de eficacia o la existencia de instalaciones que no se ajus- tan a las exigencias reglamentarias. El nuevo RIPCI fomentará que todas las empre- sas, sea cual sea su especialidad, participen del mercado en las mismas condiciones. El nuevo RIPCI introducirá además algunos aspectos fundamentales para el buen estado de la PCI, que contribuirá po- sitivamente tanto a incrementar la seguridad de las instalaciones como a dinamizar el sector. La inclusión de la actividad de protección pasiva, el Marcado CE para los equipos, un programa periódico de mantenimiento de las instalaciones, los medios humanos mínimos en las empresas instaladoras y mantenedoras, así como una relación actualizada de las normas UNE y UNE-EN, son sólo algunos de los contenidos que facilitarán que ambas perspectivas se cumplan. Antes de que acabe el mes de octubre, las asociaciones del sector de la PCI podrán presentar alegaciones al borrador que se acaba de publicar. Aunque esto implica que el texto estará a expensas de que se produzcan nuevos cambios, se- ría una gran noticia para las empresas y profesionales enmarcados en esta actividad confirmar que el RIPCI verá la luz en 2014. Seis años serían demasiado tiempo para reformar una norma que rige una actividad tan sensible como la protección contra incendios y que marcará el destino de un sector tan tocado por la crisis económica. Esperemos, por tanto, que está última versión del borrador no se quede finalmente en un intento más. S Nuevo RIPCI, cada vez más cerca “Además de adaptar las prescripciones técnicas a las necesidades actuales, contribuirá a garantizar una competencia limpia y las buenas prácticas”