Seguritecnia 402

50 SEGURITECNIA Noviembre 2013 La seguridad en los proyectos Internacionales P odríamos empezar con alguna cita del estilo de “No pregun- téis qué puede hacer vuestro país por vosotros; preguntad qué po- déis hacer vosotros por vuestro país”, pero aunque esto sea realmente algo que debemos plantearnos, también es cierto que en asuntos de tan elevado renombre como los relativos a Inteli- gencia, los empresarios suelen sentirse con poca capacidad de aportar algo re- levante y con mucha necesidad de ser apoyados por el todopoderoso Estado. Internarse y sobrevivir en lejanas tie- rras, donde el factor determinante rela- cionado con el éxito o el fracaso estará seguramente ligado al conocimiento que podamos obtener del nuevo entorno en el que nos tendremos que mover, nos plantea la acuciante necesidad de adquirir la mayor cantidad de información que seamos capaces y gestionarla de la mejor manera posible. Pero la información, en exceso, se nos puede atragantar y lo que verdaderamente necesitaremos es algún producto planificado, obtenido, elaborado, analizado y disponible cuando se precise. Necesitamos Inteligencia. Las empresas precisan mejorar sus posibilidades en Informa- tion superiority para consolidar en lo posible su capacidad en Decision supe- riority . Pero ahora hay que ponerle el cascabel al gato, y además procurando que no haga demasiado ruido – normalmente perjudicial en estos temas–, lo que podría parecernos una ardua tarea ante la que en muchos casos desgraciadamente se opta por abandonar, aun a pesar de perder una capacidad que ya hemos definido como prácticamente indispensable. Así, cuando una empresa se encuentra con una necesidad de conocimiento de carácter “especial” en el ámbito internacional y se plantea la posibilidad de poder ser auxiliada al respecto por sus propias instituciones nacionales, le suelen asaltar inmediatamente una serie de cuestiones tales como: ¿Es lícito solicitar este tipo de apoyo? ¿A quién se lo tendría que pedir? ¿Es un servicio de pago muy caro? o, incluso, la verdadera y determinante duda ¿Me va a resultar verdaderamente útil esa información? Por mi parte, yo no tengo ningún reparo en asegurar que merece la pena dotarse de esta capacidad y que nuestras instituciones tienen los medios y la voluntad de apoyarnos. Eso sí, pongamos de nuestra parte un poco de buena voluntad y tratemos también de aportar nuestro granito de arena a la Comunidad de Inteligencia, que para eso tenemos también nuestras propias capacidades. Las empresas, en espe- cial las más grandes, debieran com- partir el enorme potencial que su- ponen sus redes de activos huma- nos y tecnológicos desperdigados por el mundo y con un bagaje adquirido sobre el terreno muchas veces difícil de igualar. Ganaríamos todos, seguro. Los estados, por su parte, también s e bene f i c i an d i re c t amente a l proporcionar este apoyo, ya que necesitan del poder y crecimiento de sus empresas en el extranjero para asegurar su propio bienestar y el del resto de sus conciudadanos. Son por tanto conscientes de que deben hacerlo y mueven ficha para asegurar un mejor posicionamiento de las mismas en el mundo internacional. Estamos viendo constantemente los movimientos de jefes de estado y presidentes de gobierno que se desplazan miles de kilómetros en un tour propagandístico, acompañados de empresarios y periodistas, con la intención claramente mercantilista Enrique Polanco Consultor de Seguridad Global e Inteligencia. Socio Director de Global Technology 4E Apoyo institucional a las empresas en el exterior Inteligencia Competitiva, una cuestión de necesaria cooperación

RkJQdWJsaXNoZXIy MTI4MzQz