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34 SEGURITECNIA Marzo 2015 Grandes Catástrofes y Emergencias D ecía Norbert Wiener, funda� dor de la ciencia cibernética: “hemos modificado tan radi� calmente nuestro entorno que ahora debemos modificarnos a nosotros mis� mos para poder existir dentro de él”. Y es que el hombre contemporáneo tiene que sobrevivir en un mundo cada vez más pequeño. Hoy los individuos somos espectado� res, pero también formamos parte de los terribles conflictos humanos que asolan regiones enteras. Asistimos, desde la in� timidad de nuestros hogares, a la retras� misión de desastres naturales que se lle� van la vida y el futuro de millones de se� res humanos, y nos vemos saturados con los datos vergonzosos que cada año arrastran millones de muertos y afecta� dos a causa de la desnutrición, el ham� bre, las enfermedades y la pobreza. Así que podemos decir, sin ningún atisbo de duda, que en algo más de un siglo la percepción del mundo que nos rodea ha cambiado de manera radical. Nos encontramos que a cuestiones como el terrorismo, el crimen organi� zado o los conflictos armados se les su� man otros problemas graves que exi� gen nuestra atención, tales como la vul� nerabilidad energética, la inseguridad financiera y económica, las ciberame� nazas o los flujos migratorios no contro� lados. Como añadido, todos ellos pue� den derivar en situaciones de catástrofe o emergencia. En estos casos, vemos que el sistema de actuación responde a un modelo ampliado y complejo que incluye multi� tud de actores nacionales e internacio� nales, y en el que se ven involucradas no sólo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y las Fuerzas Armadas, sino también di� versos sectores del ámbito privado y la Administración Pública en su conjunto. A todo esto, tenemos que subrayar el es� pecial protagonismo que tienen los ser� vicios de emergencias, Protección Civil, hospitales, bomberos, Cruz Roja o segu� ridad privada, entre otros. Por otro lado, ante el empuje de las amenazas que afrontamos, se im� pone la necesidad de impulsar la internacionalización de las respues� tas de forma coordinada. Todo ello re� quiere evitar duplicidades y ganar en eficiencia, ideas que no cesan de repe� tirse, �������������������������������� ya que mejorar en ambas cuestio nes será determinante ante situaciones de emergencia que sucedan a lo largo y ancho del planeta. En todo caso, la línea de actuación que marcará la diferencia entre el éxito y el fracaso en la respuesta que se dé ante un ataque masivo, un accidente grave o una catástrofe natural de gran� des dimensiones, dependerá de la ca� lidad y de la intensidad de la coopera� ción internacional que se haya desarro� llado previamente. Porque hoy en día, ni el país más poderoso asume los retos planteados en solitario. Cualquier plan que pretenda antici� parse o reaccionar ante los problemas mencionados debe contar con un he� terogéneo crisol de profesionales que actuarán, llegado el caso, desde sus di� ferentes especialidades y responsabi� lidades. Así, y a golpe de tragedia, esta� mos poco a poco avanzando hacia la construcción de un marco regulador sobre el que fundamentar este com� plejo sistema que requiere la máxima coordinación y concienciación por parte de todos los actores implicados. Cooperación policial En todo este ámbito, la cooperación policial internacional tiene un valor es� tratégico de primer nivel, puesto que no sólo supone un elemento impres� cindible para la seguridad, sino que también es una importante herra� mienta en las relaciones internaciona� les con otros estados. Jorge Fernández de Tejada Inspector jefe del Cuerpo Nacional de Policía. Sección Operativa África y Organismos Internacionales del Área de Coordinación Internacional La cooperación internacional de la Policía Nacional en catástrofes y emergencias
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