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22 SEGURITECNIA Abril 2015 Seguridad Privada en Cataluña luña. Especialmente los que se produ- cen en circunstancias extrañas. No obs- tante, su labor resulta imprescindible también en otros delitos, desde robos hasta agresiones sexuales, pasando por incendios provocados y un amplio catá- logo de casos. Según explica el inspector Daniel Martínez i Ortega, subjefe de la División de Policía Científica, la misión de los agentes de la sección se centra en “dar soporte a las unidades de investiga- ción criminal en cuestiones técnicas y científicas”. Sus expertos y su avanzada tecnología forense permiten descubrir todo aquello que inicialmente pasa des- apercibido. Gracias a su aportación se resuelven el 90 por ciento de los homicidios que se producen en la comunidad autó- noma. Sin embargo, esta división tam- bién desempeña un papel “humani- tario” en accidentes, siniestros y catás- trofes. Tras la reciente tragedia aérea ocurrida en los Alpes, en la que han fa- llecido 150 personas, la División de Po- licía Científica ha trabajado junto a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Es- tado (FCSE) en la identificación de las víctimas españolas. En casos como éste, su tarea consiste en “identificar a los fa- llecidos a través de los perfiles genéti- cos de sus familiares directos”, explica Martínez i Ortega. Los Mossos d´Esquadra destinan a 131 agentes a para cubrir esas dos ver- tientes de su trabajo, la investigación criminal y la humanitaria. Entre ellos hay biólogos, farmacéuticos, ingenieros in- formáticos, físicos y así hasta un total de 19 especialidades diferentes. Trabajan en los laboratorios del Complejo Cen- tral Policial de Sabadell (Barcelona), pero también en la calle recogiendo indicios que ayuden a identificar a los autores de los delitos. El inspector Martínez i Ortega nos acompaña en un recorrido por las ocho unidades especializadas que compo- nen la división. Cinco de ellas pertene- cen al Área Central de Identificación: inspección ocular, identificación lofos- cópica, fotografía y audiovisuales, in- formática forense y balística. Las otras Por Enrique González Herrero E l crimen perfecto no existe. Ni siquiera el que fue bauti- zado como tal por la prensa hace siete años, cuando María Ánge- les Molina asesinó a Ana María Páez, su compañera de piso en Barcelona. An- gie , como se la conocía, preparó la es- cena del crimen para que la muerte pa- reciera fruto de un encuentro sexual con otras dos personas. En realidad, la criminal narcotizó primero a la víctima y posteriormente la asfixió con una bolsa para cobrar unos seguros de vida en los que figuraba como beneficiaria gracias a la documentación falsa que aportó al banco. La farsa estaba muy bien urdida según fuentes policiales, pero no lo su- ficiente como para engañar a los inves- tigadores de la División de Policía Cien- tífica de los Mossos d´Esquadra encar- gados del caso. Esta división, perteneciente a la Comi- saría General de Investigación Criminal, desempeña un papel fundamental en los crímenes que se comenten en Cata- Son los encargados de revelar todo lo que pasa desapercibido al ojo humano. Los agentes de la División de Po- licía Científica de los Mossos d´Esquadra han ayudado a esclarecer todo tipo de sucesos en la comunidad autó- noma gracias a su pericia y a la avanzada tecnología con la que trabajan. Hasta el punto de ser el eslabón deter- minante en gran cantidad de investigaciones. La institución policial abre de nuevo sus puertas a Seguritecnia para permitir que nos adentremos en los pasillos de este gran ‘laboratorio’ para luchar contra el delito. El laboratorio contra el crimen de los Mossos d´Esquadra