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de ey ave en c de ey ave enc 16 SEGURITECNIA Mayo 2015 “La georeferencia en tiempo real puede ser una magnífica solución para conocer la ubicación de los guardas en cada momento y mejorar su seguridad” José Francisco Pinto Administrador de la Empresa de Seguridad Guarderío “El SEPRONA tiene una relación bastante cercana con los guardas rurales y hemos realizado muchas actuaciones conjuntas” Jerónimo Martínez Miembro del SEPRONA de la Guardia Civil núcleos urbanos, la seguridad privada debería ocupar “un lugar” en este ám- bito, señaló. En referencia a esta obser- vación, el reto de las empresas, como nombró César Alvarez, pasa porque “és- tas se den cuenta del futuro que pre- senta el medio rural para la seguridad”. Cree, no obstante, que quizás el error del concepto está en asociar la seguri- dad del ámbito rural con el guarda rural. “El guarda rural es una herramienta más, como es la Guardia Civil o las cámaras de vigilancia, para la protección de los bienes que se encuentran en espacios de ese tipo. En el ámbito rural hay unos problemas de seguridad que hay que contemplar desde una perspectiva inte- gral, no desde un enfoque que se limita al robo de productos”, manifestó el co- ronel de la Benemérita. Tecnología necesaria La Ley sobre Protección de Infraes- tructuras Críticas identifica a varios sectores estratégicos que son clave para el desarrollo de la vida ciuda- dana y de gobierno de nuestro país. En las infraestructuras estratégicas, que en la mayoría de los casos se en- cuentran fuera de los núcleos urba- nos, un incidente sobre su funciona- miento podría suponer un gran im- pacto en la sociedad. Y es que, como indicó Francisco José Pinto, la proble- mática que hay en el medio rural no sólo se centra en asegurar la protec- ción de las fincas de caza, de agricul- tura o de pesca, sino a todo lo que se escollo que encuentra a la hora de de- sarrollar sus actividades lejos de la ciu- dad. Por ejemplo, “la inferioridad de me- dios con los que se encuentran los guar- das rurales y la distancia, generalmente, del apoyo de las Fuerzas de Seguridad” es otra de las dificultades importantes con las que se encuentra esta figura. No obstante, Jerónimo Martínez, del SE- PRONA, reconoció que su organización tiene “una relación bastante cercana” con los guardas rurales y que han reali- zado “muchas actuaciones conjuntas”. A esta peculiaridad, Francisco Javier Gi- rona, de ANAGUAR, añadió que en su día a día los guardas rurales tienen que lidiar, en más de una ocasión, contra las mafias y los furtivos. “En este aspecto nos sen- timos desprotegidos y solos en compa- ración con los vigilantes de seguridad que se encuentran en las ciudades”. Por su parte, su compañero Agustín Esteban coincidió con él en que “el nuevo Regla- mento tiene que cuidar este aspecto y darles más cobertura jurídica y protec- ción frente a estas cuestiones”. Por otro lado, Manuel Yanguas, del CNP, tras su experiencia en el área de Se- guridad Ciudadana en Burgos, matizó que la nueva delincuencia es itinerante. “Los malhechores se mueven de la ciu- dad al ámbito rural muy fácilmente, y vi- ceversa. Por ello la seguridad tiene que ser igual tanto en las ciudades como en el medio campestre o en las pequeñas localidades”. Por su parte, Luis González vio conve- niente señalar que, al igual que en los

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