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57 SEGURITECNIA Diciembre 2015 Protección de Infraestructuras Críticas Los próximos meses, al margen de los planes ante- riormente comentados y de los esfuerzos en ciberse- guridad que el CNPIC comparte con el Instituto Nacio- nal de Ciberseguridad (Incibe), existen otros proyectos que se deben acometer. El primero de ellos está relacionado con la actuali- zación de las Guías de Contenidos Mínimos y las Guías de Buenas Prácticas , publicadas en 2011 y 2012, res- pectivamente, con el fin de asesorar a los futuros ope- radores de infraestructuras críticas sobre los aspectos fundamentales de los procedimientos y los elementos de seguridad y organizativos a incluir en sus Planes de Seguridad del Operador y de Protección Específicos. Sin embargo, las circunstancias de conocimiento y experiencia experimentadas en los últimos cuatro años, aconsejan que estos contenidos mínimos sean actualizados . Con este fin, en los últimos meses se ha efectuado un estudio por parte de los especialis- tas del CNPIC, donde se han incluido variables no exis- tentes en 2011, y donde además se ha contado con la experiencia y conocimiento de primera mano de los propios operadores críticos que ya han tenido que di- señar un Plan de Seguridad del Operador en los últi- mos meses. Esta nueva versión de contenidos míni- mos será aprobada por el Secretario de Estado de Seguridad próximamente. En los próximos meses, también, se procederá a la revisión del Plan Nacional de Protección de las In- fraestructuras Críticas , que data de mayo de 2007. La reciente aprobación del Plan de Prevención y Pro- tección Antiterrorista , en mayo de 2015, con una me- jor adecuación de las actuaciones frente a la amenaza terrorista, sus diferentes modalidades y su cambiante naturaleza, han hecho evolucionar el modelo, con un cambio, entre otros aspectos, de los niveles de riesgo y activación. El Plan Nacional de Protección de las In- fraestructuras Críticas, conectado operativamente con el anterior, debe adaptarse igualmente, no sólo a las nuevas directrices de éste, sino también incorpo- rar unas realidades (entre ellas, una legislación sobre protección de infraestructuras críticas) que hace ocho años no existían. Pese a los avances efectuados, aún queda mucho por recorrer. La implantación total del Sistema PIC, la integración efectiva de la seguridad (física, ló- gica y del personal) está más cerca ahora, pero aún tardará algún tiempo en materializarse. Las estima- ciones que se manejan actualmente en el Centro es- tablecen el horizonte de 2018 para que comience a ser una realidad. Pero el camino que ya se ha reco- rrido y la conciencia de que por fin empieza a exis- tir una cultura de seguridad cada vez más extendida nos llevan a contemplar el futuro próximo con mayor optimismo. S
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