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34 SEGURITECNIA Mayo 2016 Seguridad en la distribución O frecer un servicio de seguri- dad excelente en centros del sector Retail requiere tener en cuenta una gran diversidad de fac- tores y condicionantes, pues se trata de una actividad económica que con fre- cuencia integra en su día a día cometi- dos que no consisten en la propia acti- vidad comercial y de ocio. Me refiero a cuestiones como la logística, la gestión de tráfico, el control de masas, la aten- ción al cliente, la gestión de emergen- cias…, que debe llevarnos a un con- cepto más global, que denominamos “solución de seguridad”. El nivel de riesgo, las vulnerabilida- des y, en definitiva, las necesidades de seguridad en general varían de una instalación a otra, sobre todo en lo que se refiere a los grandes centros comer- ciales, cuyo carácter único en la mayo- ría de las ocasiones –no hay dos igua- les– requiere un diseño confeccionado como “trajes hechos a medida” en tér- minos de protección. Ello exige crear un modelo propio, un modelo que debe ser evolutivo y adaptable, que contemple de forma integradora las variables de la actividad y de su propio enfoque comercial. Mención aparte merecerían otro tipo de espacios del sector de la distribución como las ca- denas, donde habitualmente sí es posi- ble reproducir el servicio de seguridad prestado en las diferentes sucursales, al igual que suele ocurrir con otro tipo de actividades y servicios contratados por estos comercios. La diferenciación entre las franjas ho- rarias de apertura y cierre es el primer factor a tener en cuenta a la hora de de- finir una solución de seguridad óptima, tanto desde el punto de vista del nivel de seguridad como de la coherencia presupuestaria. Ni que decir tiene que mientras el centro permanece abierto son unas las necesidades y que éstas dan un gran giro en horario de inac- tividad, momento en que desapare- cen los clientes. La clave para alcanzar ese doble objetivo (nivel adecuado de seguridad y proporcionalidad econó- mica) reside, sin lugar a dudas, en asig- nar los medios de protección precisos para cada momento, tanto desde el punto de vista de los recursos humanos como de los tecnológicos. Vigilancia remota ¿Por qué contar con la única opción de la vigilancia presencial durante las 24 horas cuando hoy en día existe tecno- logía y otros servicios de seguridad al- ternativos que nos permiten combinar exponencialmente la vigilancia de ma- nera remota mientras el centro perma- nece cerrado? En ambos casos, la ges- tión de la seguridad la llevan a cabo vigilantes habilitados debidamente y formados para el puesto, ya que las so- luciones de vídeo remoto solamente son gestionadas por estos profesionales de seguridad, en el caso de mi compa- ñía desde nuestro Securitas Operation Center (SOC). Hoy en día los gestores de centros co- merciales comienzan a ser conscientes de las soluciones alternativas que tie- nen a su alcance, como, por ejemplo, esta que acabo de mencionar, que per- mite resolver las horas nocturnas con la combinación de un servicio de vigilan- cia presencial itinerante (con una, dos o más visitas por la noche tanto en su versión física como virtual o remota) y videovigilancia con tecnología de veri- ficación de alarmas de intrusión, todo conjugado con mecanismos y recursos de reacción. Es evidente que las insta- laciones tienen que contar con un nivel de protección adecuado, pero es nota- blemente importante el modelo de se- guridad escogido para conseguir el ob- jetivo, la manera de hacerlo. Nuestra Fernando Lucas / Director del Mercado Vertical Retail de Securitas Seguridad España Tendencias de seguridad en la actividad ‘retail’ Tener en cuenta la actividad del centro comercial en las diferentes franjas horarias y aplicar criterios en función de esta condición es fundamental para dar con el servicio de protección óptimo para el sector Retail, que hoy en día busca sostenibilidad en el presupuesto, un nivel de seguridad adecuado a sus necesidades reales y la excelencia en la atención al cliente final. La diferenciación entre las franjas horarias de apertura y cierre es el primer factor a la hora de definir una solución de seguridad óptima