Seguritecnia 450
76 SEGURITECNIA Febrero 2018 Así Opinan L a seguridad se ha convertido en el arma arrojadiza frente a la incertidumbre generalizada caracterís- tica de la sociedad moderna y, especialmente, frente a las alarmantes cifras de robos, hurtos y demás inciden- cias. Por ello, se puede considerar que existe una tendencia continuista que experimentará el sector a corto plazo. Ade- más, la seguridad es hoy en día un aspecto muy valorado por empresas y particulares. Destaca que, durante los últi- mos años, el sector privado ha evolucionado hacia un tra- bajo más estrecho con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Policía Nacional y Guardia Civil han reconocido la importancia de estrechar lazos y unir fuerzas con el sector privado para aumentar su efectividad ante nuevos peligros y amenazas como el terrorismo yihadista o el crimen orga- nizado. La seguridad privada contribuye cada día de ma- nera importante a tener un país más seguro y a aumentar la seguridad ciudadana en nuestras ciudades y calles. Sin embargo, el sector, y en especial las pequeñas y me- dianas empresas de seguridad privada, se enfrenta a varias incidencias, algunas actuales y otras ya más antiguas. Las presentes consisten en la aplicación del recientemente fir- mado Convenio Colectivo de Seguridad Privada y la falta de un marco normativo actualizado, mientras las antiguas son el intrusismo y la competencia desleal. Respecto al Convenio Colectivo 2017-2020, con las subi- das aprobadas en el mismo fuera de la realidad, las empre- sas van a tener muchos problemas para mantener su sub- sistencia, pues muchas de ellas, antes de la aprobación del convenio, ya estaban en situaciones económicas deficitarias o con márgenes en su caso muy limitados. Respecto al marco normativo, el panorama no es muy alentador, pues nos encontramos con una Ley de Seguri- dad Privada aprobada en 2014, pero que no ha sido toda- vía desarrollada reglamentariamente, aplicándose como periodo transitorio el Reglamento de Seguridad Privada de 1994, que desarrollaba una ley anterior. Es decir, que el sector lleva tres años sin que haya una norma que desa- rrolle la ley actual. En relación con el contenido que circula del borrador de este reglamento tan esperado, parece que es muy ex- tenso y poco ágil. Intenta aglutinar, también en multitud de anexos, las órdenes ministeriales aprobadas en 2011 y exige ciertos requisitos a las empresas (certificaciones y au- ditorías), por lo que FES ya está preparando un dossier de propuestas para presentarlas a la Administración en el mo- mento legislativo correspondiente. Acabar con el intrusismo Por otra parte, una de las lacras del sector de la seguridad privada sigue siendo el intrusismo. Su aumento vertiginoso ha supuesto la pérdida de muchos puestos de trabajo de vigilantes de seguridad; pero, sobre todo hay que seña- lar que el constante incumplimiento de la normativa por parte de las empresas que realizan esta actividades pone en grave riesgo la seguridad ciudadana y ofrece una pé- sima imagen del sector. Este aspecto entra en relación con el problema de que las llamadas “empresas piratas” participen en concursos públicos donde se “tiran los precios” y salen adjudicatarias de los mismos. Son “ofertas a la baja” que, en muchos de los casos, no garantizan los derechos laborales de los tra- bajadores ni la adecuada prestación del servicio. Estamos ante un debate abierto a consecuencia de una mala praxis en la privatización de la seguridad por parte de las admi- nistraciones públicas a fin de abaratar los servicios que an- tes prestaba la seguridad pública, contratando ahora ser- vicios de este tipo con empresas privadas cuyo criterio de adjudicación definitivo es el precio, sin importar la in- cidencia que esto tiene. Esperamos que con la nueva Ley de Contratos del Sector Público desaparezca esta prác- tica, pero hay que dar un poco más de tiempo para que se vean los efectos de su aplicación en las licitaciones y adju- dicaciones. Este sector se encuentra en un momento clave para re- inventarse y definir un futuro mucho más estable para las empresas y profesionales de la seguridad, para así ofrecer a la sociedad la seguridad que reclama ante los nuevos re- tos y amenazas. Como ha hecho siempre, FES apoyará a las pymes en sus necesidades y defenderá sus intereses para que tengan su hueco, siempre necesario, en el mercado, y continuará trabajando en beneficio de sus empresas asocia- das y de la calidad del sector. S Situación actual de la seguridad privada desde el prisma de las pymes José Manuel López Fernández Presidente de la Federación Empresarial Española de Seguridad (FES)
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