Seguritecnia 464
42 SEGURITECNIA Mayo 2019 Comercio Distribución Logística L a realidad política y jurídica que la seguridad privada está vi- viendo le hace adquirir una re- levancia y una exigencia a la que no pueden permanecer ajenos los depar- tamentos de Seguridad, toda vez que de este protagonismo va a derivarse una creciente responsabilidad de los di- rectores de Seguridad en orden al des- empeño de sus funciones. Una vez en vigor la nueva Ley de Se- guridad Privada, la figura del director de Seguridad cuenta con una regulación legal específica que contempla desde los requisitos formativos para la obten- ción de la habilitación hasta las funcio- nes atribuidas, perfectamente descritas en el artículo 36 de esta Ley. Así, para el caso que nos ocupa, quiero hacer mención especial a las si- guientes funciones: La organización, dirección, inspec- ción y administración de los servi- cios y recursos de seguridad privada disponibles. La identificación, análisis y evalua- ción de situaciones de riesgo que puedan afectar a la vida e integridad de las personas y al patrimonio. La planificación, organización y con- trol de las actuaciones precisas para la implantación de las medidas con- ducentes a prevenir, proteger y re- ducir la manifestación de riesgos de cualquier naturaleza con medios y medidas precisas, mediante la elabo- ración y desarrollo de los planes de seguridad aplicables. El control del funcionamiento y mantenimiento de los sistemas de seguridad privada. La comunicación a las Fuerzas y Cuer- pos de Seguridad competentes de las circunstancias o informaciones rele- vantes para la seguridad ciudadana, así como de los hechos delictivos de los que tenga conocimiento en el ejercicio de sus funciones. Las comprobaciones de los aspec- tos necesarios sobre el personal que, por el ejercicio de las funciones en- comendadas, precise acceder a áreas o informaciones, para garantizar la protección efectiva de su entidad, empresa o grupo corporativo. Para el desempeño de estas funcio- nes, los directores de Seguridad pueden disponer de un equipo multidisciplinar, de elementos físicos, electrónicos y lógi- cos de seguridad y de seguros que pue- dan cubrir las amenazas no gestiona- das con los elementos anteriores. Todos estos aspectos de la seguridad los con- vierte en auténticos gestores. No tenemos que olvidar que la base de una buena gestión es el análisis de todas las situaciones que afectan de un modo u otro a nuestras empresas, y para ello es fundamental la obtención de información y su explotación que nos facilite la toma de decisiones en la gestión de la seguridad. Pero no siempre es tarea fácil, y mu- cho menos cuando hablamos de se- guridad en distribución y centros comerciales, ya no solo por los in- cidentes en tiendas, camiones o en almacenes, todos ellos delitos “tra- dicionales”, sino por la aparición de otros “más novedosos” como la ci- berdelincuencia, el terrorismo yiha- dista o el fraude en el comercio elec- trónico. A esto hay que sumarle la di- ficultad en la gestión de almacenes, centros logísticos y de cientos o miles de tiendas repartidas por todo el terri- torio nacional o el número de perso- nas que pueden concurrir en un cen- tro comercial. Roberto Ranera / Director de Desarrollo de Negocio de Milson Ingeniería ‘Big Data’ sin datos: misión imposible
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy MzA3NDY=