Seguritecnia 467

SEGURITECNIA Septiembre 2019 71 Control y gestión de alarmas Captar clientes finales apoyados en la marca común Grupo On, que cuenta con la habilitación de insta- ladora nacional a disposición de es- tas oportunidades. Clientes princi- palmente con delegaciones reparti- das por todo el territorio estatal, que buscan una alternativa a las gran- des empresas nacionales donde lo- grar un buen servicio pero a un pre- cio más razonable. Clientes que pos- teriormente serán atendidos por el conjunto de asociados en función a su cercanía. Contar con una central receptora de alarmas (CRA) por y para instala- dores, técnicamente puntera y di- versa. Adecuadamente dimensio- nada en personal operativo, sin rega- teos para mejorar la rentabilidad del negocio. Con técnicos de soporte que de verdad lo son por experien- cia, cubriendo un amplio horario dia- rio, incluso nocturno, cuando algu- nos técnicos aún están en la calle trabajando y otros pueden necesitar ayuda. Capaz de asumir operativas a medida, las que ocasionalmente necesitan las instalaciones especia- les, aquellas que permiten a los aso- ciados diferenciarse de sus compe- tidores. Una CRA que innova, que diversifica sus servicios a otros dis- tintos a los de respuesta policial, es- pecializándose en atención de even- tos diversos, técnicos, de control y asistenciales. Y sobre todo propia, lo que en la práctica significa invendi- ble. Como instalador, tener tu pro- pia CRA anula el riesgo de conec- tar tus clientes con la empresa de un tercero, que puede caer en ma- nos de un competidor indeseado si esa compañía es vendida, como úl- de pensamiento se desarrollan múlti- ples acciones de interés común. Iniciativas Pero ¿qué iniciativas se llevan a cabo en una sociedad multicompartida de tipo cooperativo que aporten valor a las empresas que la componen? La res- puesta, de nuevo, es sencilla: las que los asociados determinan. Son ellos mismos quienes marcan las líneas ge- nerales de actuación. Las ideas se de- baten y las propuestas se comparten para llevarse a cabo aquellas que son apoyadas por una mayoría, las que ma- yor valor aportan al conjunto. Algunos ejemplos son los siguientes: Negociar con proveedores para conseguir mejores condiciones de compra de los asociados. Funcionar como central de compras. Contar con un comité técnico para el análisis de productos, emisión de in- formes de ensayos, compartir la expe- riencia técnica y asesorar en la resolu- ción de problemas técnicos comunes. dad cooperativa ha sido el aplicado en Grupo On Seguridad. Actualmente, 34 empresas instaladoras de sistemas de seguridad e incendios de toda Es- paña (si bien la cifra crece cada año) comparten una sociedad mercantil conjunta. Todas las compañías asociadas son dueñas de Grupo On Seguridad, con- formando a su vez la mayor red nacio- nal de empresas instaladoras agrupa- das. Es la iniciativa de mayor éxito ha- bida hasta hoy en España en alcance cooperativo entre firmas instaladoras, el ejemplo vivo de cómo se puede ser competencia pero al mismo tiempo co- laborar en asuntos de interés común. Desde su sociedad multicompartida, los asociados (es decir, las organizacio- nes instaladoras) abordan necesidades comunes, analizan conjuntamente ries- gos y oportunidades y establecen estra- tegias corporativas compartidas a me- dio y largo plazo. El modelo no anula la personalidad empresarial ni la libertad de acción de cada uno de sus asocia- dos. No es una franquicia, simplemente incorpora a sus asociados capas com- plementarias de valor añadido. Como excepción a lo que sucede en cualquier empresa con ánimo de lu- cro, su objetivo principal no es que le vaya cada día mejor a la propia socie- dad multicompartida, sino a cada una de sus empresas asociadas. Grupo On es el medio, no el fin, y con esta línea La cooperación interempresarial dentro de un mismo sector añade valor a sus participantes y ayuda en su desarrollo individual