Seguritecnia 477

24 SEGURITECNIA Julio-Agosto 2020 Protección contra incendios D esde el día en que nacemos acumulamos pequeños o grandes retos. Retos que nos parecieron inabordables o complejos en su momento. Retrasamos, por algún tiempo, la incorporación de las solucio- nes de conectividad remota en nuestro trabajo, persistimos en el modelo tradi- cional y, sin ninguna duda, rechazamos adaptar nuestros procedimientos a lo que ya era un hecho. Solo un acontecimiento terrible que ha modificado nuestras vidas de forma radical y que amenaza la seguridad fí- sica y económica de tanta gente en todo el mundo nos ha obligado a cam- biar, y de aquello a lo que renunciába- mos hemos hecho virtud. En muy breve espacio de tiempo he- mos pasado a teletrabajar, a realizar re- uniones y visitas virtuales, a realizar cur- sos, a atender consultas o a resolver la mayor parte de los problemas de forma remota. Nos hemos esforzado en apli- car las herramientas que ya teníamos, hemos aprendido e incluso las hemos desarrollado o figuran ya en nuestros planes estratégicos. Aunque disfrutamos estos días de una aparente tregua, nadie puede creer que se haya escrito el último ca- pítulo. Y, no obstante, más allá de lo que tardemos en recuperar definiti- vamente nuestras vidas, no podemos permitirnos no estar preparados para lo que ha de venir. Hemos visto las po- sibilidades, y afectará en gran medida al modelo de nuestras actividades y negocios. Definitivamente, es probable que, al finalizar la década, las nuevas tecno- logías habrán modificado completa- mente la manera en que operamos o mantenemos los sistemas. Y ello reque- rirá una fuerte transformación y la ad- quisición de nuevas competencias por parte del personal de soporte. Pero no debe haber excusa. No pode- mos aceptar entornos de trabajo u ocio desprotegidos y debemos realizar el máximo esfuerzo para ofrecer alternati- vas de protección a los hogares, ahora también convertidos en centros labora- les por virtud del teletrabajo. Así, para adaptarnos a la nueva reali- dad es preciso abordar tres aspectos: la incorporación de las nuevas tecnologías, la integridad de los sistemas y compo- nentes y la renovación de los sistemas. Nuevas tecnologías La tecnología de detección ha realizado algunos progresos debido a la mejora en el rendimiento de los sensores o la incorporación de técnicas de detección. Pero fue la integración de los proce- sadores y el software lo que realmente produjo una mejora significativa en el rendimiento de los sistemas. La incorporación de la tecnología nos ha llevado a una impresionante mejora en la fiabilidad. Del mismo modo, la co- nectividad y, especialmente, la incor- poración de la gestión en la nube o el Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) supondrán un cambio aún más significativo. Dará la oportunidad para mejorar la protección mediante el uso de bases de datos y aplicaciones en la nube, facilitando la gestión para pro- Lluís Marín Coordinador del Comité de Fabricantes de Detección de Tecnifuego La nueva normalidad y el cambio tecnológico en detección de incendios

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