Seguritecnia 484

/ M arzo 2021 64 La mujer en la seguridad En los últimos tiempos, los profesiona- les de la seguridad nos hemos trans- formado en malabaristas tratando de hacer lo posible con las herramientas que tenemos y de ser resilientes. En el nuevo campo de actuación entran en acción diferentes actores como es la transformación digital, con innovacio- nes tecnológicas como la Inteligencia Artificial, Big Data, Machine Learning, Cloud o automatización robótica de proceso. Todas estas tecnologías ofre- cen a la seguridad infinitas posibilida- des y provocan que los departamen- tos de Seguridad tengan que realizar cuanto antes una adaptación tecnoló- gica e integración de conceptos, como la correlación de eventos, automatiza- ción de tareas operacionales, etcétera. De esa manera podrán optimizar los protocolos de respuesta ante cualquier tipo de evento. A su vez, hay que tener en cuenta que la implementación de estas nuevas tecnologías trae nuevos riesgos asocia- dos que anteriormente no habían sido valorados por estos departamentos. El principal reto es que los departamen- tos de Seguridad tengan una mayor capacidad multidisciplinar y cuenten con el dimensionamiento adecuado para adaptarse a estos nuevos mode- los y poder convertirse en un agente de cambio que aporte valor al negocio, y no que siga considerándose un gasto. Ahí está la oportunidad. Nieves Beitia Vicepresidenta del Capítulo Español de ASIS International “La tecnología obliga a los departamentos de Seguridad a adaptarse cuanto antes” Las empresas deben hacer frente actual- mente a diferentes retos, pero si partimos del contexto de la seguridad, destacaría la dignificación de la seguridad privada. Lo cual pasa por dar a conocer sus ám- bitos de actuación, sus funciones, sus logros, su aportación a la seguridad ciu- dadana, y en definitiva, lo esencial que son los servicios que presta el personal de este sector. Dando visibilidad al pa- pel de la seguridad privada como parte integrante de la seguridad pública, tal y como recoge el preámbulo de la Ley de Seguridad Privada, conseguiremos que se ponga en valor su contribución a garantizar el libre ejercicio de derechos y libertades de los ciudadanos y su se- guridad. Y alcanzaremos algo todavía más relevante: hacer atractivo el sector a la mujer y que la representación de las mujeres refleje mejor el porcentaje que ocupan dentro de la población. “Si damos visibilidad al sector se pondrá en valor su contribución a la sociedad” Anna Aisa Miembro del Comité Ejecutivo de la Unión de Asociaciones de Seguridad (UAS) Según datos del INE, de julio de 2020, la población en España era de 47.351.567 personas, de las cuales las mujeres re- presentan algo más del 50 por ciento. Sin embargo, esta situación no se refleja en las plantillas de las empresas de se- guridad privada. El valor añadido que las mujeres podrían aportar solo se percibe a través del reducido porcentaje que ya forman parte del sector; lo cual no obsta para seguir avanzando en este sentido.