Seguritecnia 493
/ Enero-Febrero 2022 24 Así opinan Para APROSER es capital la lucha deci- dida contra la competencia desleal y el intrusismo, y a favor de la excelencia en la calidad y la dignificación del sector, de sus empresas y sus profesionales, como garantía previa para su futura viabilidad. La nueva normativa laboral, que reafir- ma la prioridad aplicativa del Convenio Colectivo sectorial, y donde APROSER ha desempeñado un lógico y legítimo liderazgo, refuerza la aplicación de unas mismas reglas de juego. En este nuevo contexto, el Convenio Colectivo debe contemplar la futura trans- formación radical de todos los servicios y procesos para la prestación de servicios, y en particular, en el ámbito del transpor- te de fondos y gestión del efectivo. Esta industria debe ser capaz de asu- mir nuevas responsabilidades, alineán- dose con el reto de la digitalización de la economía, que debe llevarse a cabo desde la preservación del carácter esen- cial del factor humano y plasmarse efi- cientemente en la relación bidireccional entre seguridad pública y privada. Es necesario abordar la transforma- ción ecológica, que debe compatibilizar- se con la preservación de los actuales niveles de seguridad, y no dejar de lado tanto la plena integración de aquellos colectivos poco representados como la atracción de nuevo talento. Para ello, en- tre otras medidas, la formación profesio- nal de acceso al sector es un elemento fundamental. “La lucha contra la competencia desleal es capital” Á ngel C órdoba P residente de APROSER La pandemia ha acelerado el proceso de digitalización que estaban desarrollan- do las empresas de seguridad privada. Esto ha comportado que la ciberseguri- dad, entendida no sólo desde el punto de vista de la seguridad informática sino también desde la protección de la infor- mación y de las comunicaciones de las empresas, se haya convertido en una de las principales prioridades. Los procesos de gestión interna de las empresas han cambiado, la forma de relacionarse con sus clientes y sus proveedores, el teletra- bajo se ha convertido en una práctica habitual y, en definitiva, la conexión a los sistemas de la empresa desde entornos externos tiene lugar habitualmente. La protección del flujo de la informa- ción, de las comunicaciones internas y externas, así como de los datos con los que trabajan las empresas de seguridad, es una prioridad. Estas no sólo deben implantar procesos de digitalización, sino que han de velar por garantizar la seguridad de los mismos, por intentar garantizar la invulnerabilidad de los sis- temas de seguridad que instalan y por apostar por la protección de la informa- ción que dichos sistemas procesan. Los ciberataques deben incluirse en los análisis de riesgos de las organiza- ciones. La necesidad de conocer las vulnerabilidades de las empresas es fun- damental y requiere inversión de medios económicos, técnicos y humanos para protegerse. “La protección de los datos y la información es prioritaria” A nna A isa G erente de ACAES
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