Seguritecnia 493

/ Enero-Febrero 2022 34 Así opinan En AECOC conocemos de primera mano el gran impacto que causa la pérdida en el sector comercial y de gran consumo. Además, con el desarrollo tecnológico, esta problemática está adaptando nue- vas y cambiantes formas, por lo que el riesgo se diversifica. Por eso resulta imprescindible entender que la prevención de la pérdida debe in- fluir en toda la cadena de valor. La reduc- ción del volumen de pérdida es el primer objetivo de AECOC, pero para lograrlo es necesario establecer controles, procedi- miento y protocolos que afecten a toda la cadena y que resulten útiles y eficaces para nuestros más de 30.000 socios. Los principios que marcan las priori- dades de AECOC en la prevención de la pérdida son: Trabajar en un modelo holístico, que aborde la problemática desde el estu- dio de los puntos de venta, la cadena logística, el e-com merce y la activi- dad corporativa en su conjunto. Profundizar en el desarrollo de protocolos y procedimientos que puedan reducir el fraude externo, el fraude interno y los errores de gestión. Apostar por la evolución tecnológica en materia de control de stock , video- vigilancia, analíticas de video e inteli- gencia artificial. Continuar trabajando en la lucha pe- nal contra la multirreincidencia del hurto. Mantener la colaboración directa con las diferentes Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. “Nuestra prioridad es reducir el volumen de pérdida” L eandro F ernández R esponsable de P revención de la P érdida D esconocida de AECOC Para los centros de formación asociados a ASEFOP es prioritario un cambio legis- lativo relativo a la formación del sector. Un cambio que aporte claridad e igual- dad entre las distintas opciones de for- mación del personal de seguridad para la obtención de la tarjeta de identidad profesional, igualando la vía del Minis- terio del Interior, la vía de los Certifica- dos de Profesionalidad y la que, según parece, llegará en breve a través de la Formación Profesional. Por otro lado, la formación perma- nente y las diferentes especialidades que existen deben adquirir un rango de mayor seriedad y control. Es necesario garantizar una actualización y especiali- zación del personal de seguridad acorde a la situación actual que vive nuestra sociedad. Porque la actual legislación sobre la homologación de centros de formación de seguridad privada y la falta de un control riguroso sobre la formación del sector, facilita la aparición de centros ‘fantasma’ que deterioran la calidad de la formación, especulando en la mayoría de los casos con las subvenciones que reciben las empresas para capacitar a los profesionales. “Urge un cambio legislativo de la formación del sector” J osé M anuel A lonso P residente de ASEFOSP