Seguritecnia 494

/ Marzo-Abril 2022 104 Ciberseguridad E n los últimos tiempos, todos hablamos de ciberseguri- dad como si fuera un com- plemento a nuestra respira- ción diaria que nos hace vivir. Pero más allá de opinar, reflexionar e intentar apli- car unos correctos hábitos en el debido uso y control de la tecnología, habrá que tener en cuenta que los ámbitos más tradicionales que velan por la correcta gestión de los riesgos físicos deben evo- lucionar y adaptarse a la cultura de la ciberseguridad y a su modo de gestión. Exponíamos en el último SICUR que la digitalización del sector de la seguri- dad privada es la antesala de la correcta convergencia entre la seguridad física y la seguridad lógica, como instrumento de integración estratégica de los recur- sos de seguridad de las compañías. A grandes rasgos, se entiende por digi- talización la adaptación de los procesos convencionales a un modelo puramente automatizado y basado en el uso de he- rramientas tecnológicas, que se integran dentro de una misma plataforma digital e interconectada con todos los activos, para una correcta gestión de la informa- ción que manejan, consiguiendo de esta manera la posibilidad de analizar dicha información en tiempo real y generar una acertada toma de decisiones, siempre bajo los objetivos y premisas marcados por nuestros clientes, así como la estra- tegia corporativa de nuestras compañías. Esto es, en definitiva, la gran evolución de la seguridad, con el importante salto cualitativo que ofrece la interconexión de los sistemas, tanto a nivel interno como con clientes y proveedores. Dos nuevos retos Llegados a este punto y debido a la di- gitalización, existe una nueva depen- dencia tecnológica que no había hasta el momento. Las empresas tendrán dos nuevos retos: por un lado, el desarrollo y despliegue de un modelo operativo de ciberseguridad para la protección de los sistemas tecnológicos, fruto de la digitali- zación, así como del uso interno de todas sus redes y conexiones; y, por otro lado, la ciberseguridad como modelo de negocio, con la oferta de servicios profesionales y competitivos para nuevos clientes. Todos los días nos levantamos con infi- nidad de noticias sobre ataques informá- ticos, sistemas caídos e indisponibilidad sistemática de plataformas que reflejan las amplias vulnerabilidades tecnológicas del entorno donde ofrecen sus servicios. A este respecto, el sector de la seguridad privada no se encuentra ajeno a dichas amenazas. ¿Qué quiere decir esto? Que un primer objetivo es la incorporación de perfiles profesionales en el campo de la ciberseguridad dentro del sector de la se- guridad privada, si queremos ir alineados con la evolución del resto de sectores. Este compromiso aportará valor tanto para proteger a su compañía, como para desarrollar otras vías de negocio. Es condición para una correcta pro- tección del entorno digital, al igual que ocurre con la seguridad física, que los profesionales de la ciberseguridad estén actualizados y capacitados para un uso correcto del software de protección y gestión de las vulnerabilidades. En definitiva, lo anteriormente expues- to se refiere a la necesidad de incorporar perfiles profesionales competentes en materia de ciberseguridad, herramientas y procedimientos que ayuden a la com- pañía a protegerse. Es necesario hablar de un lenguaje de riesgo sin apellidos, ni de física ni de lógica, simplemente la Ciberseguridad y formación para no técnicos en el sector de la seguridad privada P ablo B lanco Í ñigo A lianza E spañola de S eguridad y C risis ( aes Y c ) J oaquín del T oro J iménez A lianza E spañola de S eguridad y C risis ( aes Y c )

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