Seguritecnia 496
/ Julio-Agosto 2022 236 Expertos “La seguridad privada ha de ser receptiva a nuevas especialidades” Manuel Campos Director de Seguridad de la Catedral de Sevilla D entro del amplio catálogo de actividades que engloba la seguridad privada, la tecnología aportará un gran valor en las próximas déca- das. Este factor irrumpirá como un elemento determinante en el devenir del resto de actividades propias ya implantadas; es decir, que no solo se implementará con nuevos servicios que aporten progresivamente las tecnolo- gías emergentes, sobre todo basadas en la Inteligencia Arti- ficial y robótica, sino como un acompañante diferenciador y que aporte valor al factor humano y organizativo. Un factor este último que, como es lógico, no deberá ser menoscabo de la presencia necesaria del servicio humano. Es más, di- cho servicio humano deberá estar formado con estas nue- vas herramientas tecnológicas y encontrarse en constante aprendizaje con el fin de obtener el mayor provecho (toma de decisiones, comunicaciones, etc.). En un futuro cercano nos encontraremos con un panora- ma diferente al actual. Incluso a nivel profesional, en el mer- cado laboral desaparecerán algunas profesiones y surgirán nuevos perfiles. Por tanto, la seguridad privada, que suele destacar por estar en línea con las exigencias del mercado, no debe ser ajena a dichos cambios. Además, ha de ser re- ceptiva a nuevas especialidades dentro del ámbito general de la seguridad: operadores de drones, de análisis preventi- vos, etc. “La amenaza interna y la ciberdelincuencia serán algunos de los retos” Guillermo González Director de Inmuebles, Seguridad y Servicios de Cecabank E n las próximas décadas serán determinantes varios factores. El primero será la alta implementación de tecnologías basadas en Inteligencia Artificial; sistemas de videovigilancia con interpretación de escenas con alertas inteligentes, combinados con el resto de sistemas de seguridad, para ofrecer seguimiento de eventos y vigilancia electrónica activa y que facilitarán la tarea a las personas. Esta tecnología estará implementada en dispositi- vos IoT conectados a redes de alta velocidad 5G o posteriores. El segundo, la mayor profesionalización del personal de seguridad y la incorporación de nuevo talento. Nuevo talento que necesariamente tendrá un perfil con formación de base más técnica para conocer y manejar los sistemas de seguri- dad, cada vez más sofisticados. El tercer factor será una nueva orientación de la seguridad privada con el foco en la continuidad de negocio como con- cepto más amplio que el de la seguridad clásica. A la gestión de la seguridad física se unirán nuevos retos como la amenaza interna y la ciberdelincuencia, así como otras capas de gestión de inteligencia para ofrecer soluciones de seguridad integral. Por último, destacar la potenciación de la colaboración pú- blico-privada a todos los niveles. No solo en infraestructuras críticas o en grandes corporaciones, sino también en el resto de empresas con nuevas exigencias y la necesidad de incre- mentar el intercambio de información.
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