Seguritecnia 499

/ Enero-Febrero 2023 90 Seguridad en Museos metidos contra el patrimonio cultural. Colaborar en los programas formati- vos relacionados con la seguridad del patrimonio cultural: personas, obras y equipamientos. Necesidad de sensibilizar a los princi- pales agentes involucrados en la pre- vención, protección y salvaguarda del patrimonio cultural, y establecer ámbi- tos de colaboración en favor de los visi- tantes, los bienes, y sus equipamientos. Factores sustantivos Para finalizar, y teniendo presente la ac- tual definición de museo promovida por el ICOM, quiero destacar algunos facto- res que han sido sustantivos de nuestra labor como asociación y que deben te- ner reflejo en el desarrollo profesional de los equipos: Entender la institución cultural como un sistema integrado y complejo de profesionales de diferentes disciplinas. Desarrollar la capacidad para analizar las necesidades de nuestra organiza- ción integrando parámetros específicos de los entornos culturales. Una de las singularidades de nuestros centros es el público visitante que le da sentido a los activos y actividades de los mismos. Hacer pedagogía de la seguridad entre los equipos de las instituciones como un factor estratégico para el cumplimiento de la misión y visión de nuestra organización. El factor humano. Las aptitudes y actitudes de cada profesional han de estar en sintonía con esa multiplicidad de realidades y necesidades que se dan a diario. Por ello, la cultura de la seguridad en el patrimonio cultural debe ser enten- dida por toda la organización no como una serie de protocolos, sino como un marco de interacción en el que nadie puede sentirse ajeno. Ya lo decía Cice- rón, “si quieres aprender, enseña”. Conceptualización. La seguridad, como cualquier otro ámbito profesional, debe actualizar permanentemente sus marcos de referencias para proponer nuevas so- luciones a las diferentes amenazas, ries- gos y vulnerabilidades. Contextualización. El contexto de la se- guridad viene determinado por sus tres componentes básicos: valor, protector, amenaza. Para desarrollar los objetivos de prevención y protección, deben es- tar sometidos a un análisis permanente al objeto de adaptarlos a los continuos cambios que experimentan el sector y la sociedad. Metodología. Es necesario aunar un enfoque confluyente entre la teoría y la práctica para evitar desencuentros o dis- funciones entre los diferentes agentes implicados. En este contexto, donde confluyen di- ferentes agentes, Protecturi potencia la colaboración, la comunicación, la coor- dinación y la complementariedad entre la seguridad pública y la privada, en los conceptos de prevención, protección y salvaguarda del patrimonio cultural. En- tre ellas, a trabajar las siguientes ideas: La implementación entre instituciones culturales y seguridad pública de una red de alertas tempranas que permita tener, al momento, el conocimiento de todo lo relacionado con los delitos co- también la toma de decisiones para es- tablecer los recursos, programas y proto- colos adecuados en cada situación. Sin duda, la combinación de estos factores, nos permitirá intervenir a tra- vés de nuevos canales, así como ajus- tar la velocidad de la interacción a las demandas reales de las instituciones culturales. Cada vez más, comprobamos la gran aportación de los profesionales que trabajan en la “sensibilización” de la protección del patrimonio cultural. Toda ayuda siempre es beneficiosa. Grandes aprendizajes Avanzar en prevención es avanzar en seguridad. La experiencia de los últimos tres años, y recordando que la quimera del riesgo cero no existe, nos ha aporta- do grandes aprendizajes. Entre los que destacaría está la necesidad de amalga- mar el conocimiento adquirido –que ha cimentado una cultura de la seguridad del patrimonio cultural– con la inno- vación tecnológica, que nos permitirá intervenir y desarrollar programas de seguridad adaptados a cada centro, a cada área, a cada actividad. Complementariamente a la seguridad híbrida, debemos seguir insistiendo en los conceptos “clásicos” de conceptuali- zación, contextualización y metodología, como factores determinantes de la segu- ridad integral.