Seguritecnia 499
Seguridad en Museos Un ejemplo claro de ello son los acon- tecimientos de los últimos años, en los que hemos tenido la amenaza de los ataques terroristas, una pandemia mundial, una guerra e incluso el cam- bio climático. Menciono este último no solo por las consecuencias direc- tas que genera, sino también porque hemos sido blanco de las protestas de los activistas como elemento mediáti- co de sus acciones de sabotaje. Por lo tanto, no nos queda otra que hacer análisis y supervisión constan- tes, trabajando desde la prevención; ser capaces de reaccionar de manera eficaz ante las amenazas; ser proacti- vos en la localización de estas y tener preparados planes de contingencia que nos permita ser resilientes. En definitiva, creo que nuestra se- guridad debe ser integral, haciendo frente a amenazas de distintos ámbi- tos. Incluso hay un riesgo que hasta este momento no hemos mencionado y que cada día cobra más importancia: el reputacional. En este mundo cada vez más global, donde las comunica- ciones se miden en segundos, pode- mos ser noticia y atravesar fronteras de forma instantánea, por lo que de- bemos estar preparados para dar res- puesta a todo tipo de situaciones. ¿Cómo cree que evolucionará la se- guridad de los museos de aquí a una década? Creo que la evolución vendrá determi- nada por la innovación en sistemas, en procesos y en la gestión. Es muy impor- tante la capacidad que tengan nuestros departamentos de seguridad de adap- tarse al cambio, a las nuevas y cam- biantes amenazas. Nuestro mayor reto será el tratamiento de la información que nos llega desde nuestros sistemas y cómo gestionarla de manera eficaz y eficiente. En nuestro caso, por el tipo de obra que trasladamos, en la mayoría de los casos no es obligatoria la presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguri- dad, aunque cuando hemos requerido su apoyo la colaboración ha sido total, del mismo modo que la ayuda de la empresa de seguridad que presta ser- vicio en el Museo Guggenheim. En el apartado de la seguridad de las obras y como acción de mejora que hemos tratado de exportar desde el área de seguridad del Museo Gugg- enheim Bilbao, está la implantación de soluciones tecnológicas para los traslados. Soluciones tecnológicas que nos permiten conocer en tiempo real y en todo momento el estado del transporte y de las obras que se tras- ladan: ubicación, situación, estado (si han sufrido golpes o movimientos ex- traños, paradas improcedentes, aper- tura de la plataforma de carga, mo- vimientos del embalaje...), imágenes del camión y su carga, comunicación directa con los transportistas… Todo ello supervisado desde un centro de coordinación. Al margen de los riesgos intrínse- cos al museo, ¿cuáles son, desde su punto de vista, las principales pro- blemáticas y necesidades a las que se enfrentan los museos actualmente en materia de seguridad? Los museos no somos ajenos a la pro- blemática general de nuestro entorno. hasta el desmontaje. Cada exposición es un nuevo análisis de riesgos que genera una adaptación de los sistemas adscri- tos a la misma, así como de todos los procedimientos relacionados. Esto, que aparentemente puede pa- recer un gran esfuerzo, se convierte en una oportunidad de mejora, ya que el análisis de riesgos es algo vivo y en per- manente actualización. No hay que ol- vidar que el Museo Guggenheim Bilbao expone entre seis y ocho exposiciones distintas cada año. Entre las actividades de los museos se encuentra el traslado de obras, tanto las que se prestan como las que se reciben de otras instituciones. ¿Cómo han mejorado los protocolos en es- tos casos, tanto por parte de los pro- pios museos involucrados como de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y otros agentes implicados? Para el traslado de las obras de arte, el museo pone en primer lugar su confian- za en empresas de transporte contrasta- das y que cumplen con los estándares internacionales de seguridad de las obras durante los traslados, seguridad ante robo, seguridad ante accidente o emergencia, así como seguridad frente control climático de las obras. Además, en bastantes ocasiones estos traslados o embarques son aéreos, por lo que debemos cumplir con los protocolos de seguridad aérea de AESA. No en vano, somos expedidor conocido y los trans- portistas agentes acreditados. “La evolución de la seguridad de los museos vendrá determinada por la innovación en sistemas, en procesos y en la gestión” / Enero-Febrero 2023 97
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