Seguritecnia 500

Expertos 164 Marzo-Abril 2023 / En los últimos años, la pandemia ha su- puesto un impacto de grave afectación a la salud, la economía y la seguridad, convirtiéndose en el evento de mayor impacto desde la II Guerra Mundial. Y a eso hay que sumarle los efectos co- laterales que van a producirse con el cambio climático, los ciberataques y las recurrentes crisis financieras. Por otro lado, la transformación digi- tal es un fenómeno imparable que nos proyecta a escenarios aún inconcebi- bles y soportados por la incipiente In- teligencia Artificial. Esta transformación tecnológica puede agudizar crisis con un impacto en nuevos conflictos arma- dos e inestabilidad social a nivel global. Aunque el plazo del año 2030 pue- de parecer lejano, hay que ir pensando hacia dónde debe evolucionar nuestro sector. La capacidad de adaptación ante los riesgos, los nuevos escenarios que se nos presentan con la trasformación digital y la resiliencia y la confianza en el potencial del factor humano que han de aportar los responsables de seguridad son una de las particularidades que des- de el ámbito de la seguridad tenemos que potenciar de manera significativa. En apenas dos decenios del nue- vo milenio estamos experimentando cambios de profundo calado en la so- ciedad. El desarrollo tecnológico en ámbitos como la digitalización, la Inte- ligencia Artificial o los drones, solo por indicar algunos ejemplos, ha supuesto un notable impacto en la seguridad. No obstante, como ha sucedido a lo largo de la historia de la humanidad, estos avances llevan implícitos los riesgos derivados del uso malicioso de dichas tecnologías. Mucho se ha debatido sobre la di- cotomía entre seguridad y libertad, habiéndose convenido razonable- mente que son conceptos comple- mentarios y no antagónicos. Este de- bate, aparentemente resuelto, debe reabrirse para evitar la intromisión en las libertades individuales y priva- cidad de los ciudadanos, las cuales podrían quedar inermes ante el cam- bio de paradigma que esta revolución tecnológica está imponiendo a mar- chas forzadas. Quizás el reto al que nos enfrentamos sea el escaso atractivo que para los profesionales de base (vigilantes y téc- nicos de sistemas) tiene actualmente la seguridad privada, carente de iniciati- vas para retener el talento y, lo que es peor, sin posibilidad de desarrollarlo con los que actualmente se desempe- ñan en él. La falta de ética imperante última- mente en nuestro sector es, en mi opi- nión, uno de los mayores impedimen- tos para la innovación al dispersar los intereses comunes a largo plazo en pro de los intereses particulares a corto. Aunar esfuerzos para construir un sóli- do futuro, tanto a nivel operativo como técnico, se ha convertido en una tarea complicada. El número de asociacio- nes, observatorios y grupos creados con intereses iguales o muy parecidos entre sí es buena prueba de ello. Si queremos avanzar, deberemos iniciar una importante reestructuración creativa antes del año 2030, pues la tecnología nos arrolla inexorablemente. Xavier Moragas Gerente de Seguridad Corporativa de Abertis Infraestructuras Sebastián Naranjo Jefe de Relaciones Institucionales con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de Protección Portuaria de la Autoridad Portuaria de Valencia José Miguel Navarro Security Strategy Director de La Zagaleta