Segurilatam 004
Editorial “Ser lo que soy, no es nada sin la Seguridad” (Shakespeare) Primer cuatrimestre 2017 3 Ana Borredá Directora de Segurilatam Podemos sentirnos orgullosos de haber sido pioneros en proclamar a los cuatro vientos que las seguridades física y lógica no podían darse la espalda Seguridad integral P arece que fue ayer y, sin embargo, ya han pasado 15 años desde que Borrmart de- cidiese enriquecer su oferta con la revista Red Seguridad . Pero con esta cabecera no apostamos únicamente por la seguridad de la información. Rizando el rizo, y plena- mente conscientes de la transformación que se estaba produciendo, sobre todo en el ám- bito corporativo, con nuestra publicación hermana reivindicamos la seguridad integral, un concepto que ha ido calando y del que presumimos en todas las portadas de Segurilatam . Entre los medios de comunicación nos sentimos orgullosos de haber sido pioneros en sentar doctrina, en proclamar a los cuatro vientos que las seguridades física y lógica no po- dían darse la espalda y hacer cada una la guerra por su cuenta. Y he aquí que, tres lustros después de nuestra reivindicación, les ofrecemos un número de Segurilatam entre cuyas in- formaciones destaca un bloque especial dedicado a las infraestructuras críticas o estratégi- cas, en las que la seguridad integral juega un papel esencial. Teniendo en cuenta que pretendemos ser un puente de conocimiento entre Europa y América Latina, permítanme decirles que en España se ha logrado un modelo de protección de infraestructuras críticas que es objeto de estudio por parte de numerosos países. Gracias al buen hacer del Ministerio del Interior, de la Secretaría de Estado de Seguridad y, muy especial- mente, del Centro Nacional para la Protección de las Infraestructuras Críticas (CNPIC), firme de- fensor de la colaboración público-privada, podemos afirmar que se ha cimentado una sólida base para garantizar la prestación de los servicios esenciales al conjunto de los ciudadanos. En el caso de Latinoamérica, poco a poco se va avanzando en una disciplina en la que la ciberseguridad, sin menospreciar a la seguridad física, se ha convertido en prioritaria. Hoy en día, claro está, no puede descartarse ningún tipo de ataque a una infraestructura crítica o estratégica. Sin embargo, es indudable que las ciberamenazas cobran especial protago- nismo, ya que en la actualidad no es necesario enviar un comando terrorista o un lobo so- litario a una instalación para causar un grave perjuicio. Basta contar con personal especiali- zado en ciberataques que, a base de tiempo y paciencia, logre franquear las barreras ciber- néticas y poner en jaque el suministro de electricidad, la actividad de un aeropuerto o la operatividad del sistema financiero de un país. Por ello, es indispensable impulsar marcos estratégicos y legislativos que fomenten la ci- berseguridad y, por ende, garanticen la protección de unas infraestructuras encargadas, como comentaba anteriormente, de prestar servicios esenciales a la sociedad. El nivel de madurez debe alcanzar la excelencia gracias a la voluntad de los entes públicos y de la cola- boración de los operadores privados. Ya que me refiero a la ciberseguridad, me gustaría resaltar que el presente número de Se- gurilatam se distribuirá tanto en Segurinfo Argentina como en Infosecurity México, dos de las citas más importantes de América Latina dedicadas a la seguridad de la información. Y también entregaremos ejemplares en Expo Seguridad México, confirmando así nuestra de- cidida apuesta por estar presentes en los principales eventos de seguridad de la región. Por último, permítanme que exprese públicamente mi emoción al constatar que los miem- bros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) española fueron ovacionados en el aero- puerto de Santiago, el pasado mes de febrero, por contribuir a combatir los devastadores in- cendios que sufrió Chile. Ello no hace sino constatar el gran valor de quienes se dedican al mundo de la seguridad, independientemente de su actividad y del país al que pertenezcan, y los lazos de hermandad existentes entre España y América Latina. Amigos chilenos y latinoa- mericanos: estamos encantados de serviros. Y cuando necesitéis ayuda, no lo dudéis: ¡llamad a nuestra puerta!
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