La naturaleza de la acción militar está cambiando rápidamente. Por ello las Fuerzas Armadas deben estar preparadas y ser eficaces en las operaciones en los nuevos entornos de confrontación. Los factores que impulsan estos cambios son la digitalización y las nuevas estrategias y tácticas que están transformando la manera de conseguir la superioridad en el enfrentamiento.
Las Fuerzas Armadas reconocen que lo digital es fundamental para el éxito de su misión, ya que impregna todos los aspectos de su operativa y estrategia. Tienen que asegurar que pueden anticipar, planificar, ejecutar y llevar a cabo con éxito operaciones en entornos complejos y multidominio. Deben desarrollar, entregar y generar conocimiento listo para la misión con estos fines. Y han de prever, dirigir y gestionar programas de defensa con y para sus gobiernos. En el entorno operativo actual, también han de liderar en el ámbito digital.
Digitalización de la Defensa
Los beneficios inmediatos de esta revolución tecnológica hace años que se evidencian en áreas como la logística, donde las grandes compañías distribuidoras, del sector de la automoción o del retail han sabido ver las mejoras de las nuevas capacidades de data, Inteligencia Artificial y analítica avanzada.
El apoyo logístico, el sostenimiento y las actividades de soporte logístico integrado (ILS, por sus siglas en inglés) al ciclo de vida, áreas hermanas de la logística en el mundo de la Defensa, pueden
igualmente aprovechar la aplicación de estas nuevas tecnologías para ser más eficientes y eficaces. La implementación de la inteligencia aplicada, el 5G, la sensorización, los gemelos digitales o el uso intensivo de robots, por mencionar algunas, introducen mejoras en la fiabilidad de los procesos, el ahorro de costes y la reducción de la huella de carbono que generan.
La nueva base logística del Ejército de Tierra es un buen ejemplo de ello, al igual que el Astillero 4.0 impulsado por la Armada, la BACSI del Ejército del Aire u otros proyectos relevantes de transformación de logística militar en Australia o Estados Unidos (US Navy y US Air Force), en los que Accenture ha tenido el privilegio de apoyar.
La continuación natural de esta revolución prosigue con la transformación de los sistemas de información y comunicaciones dedicados a funciones administrativas. Esta área vive asimismo un tiempo de cambio, donde la migración a la nube (Journey to Cloud o J2C), la automatización inteligente de tareas (Robotic Process Automation o RPA) y el aprovechamiento del dato han animado a repensar cómo se llevan a cabo las actividades administrativas para hacerlas mejor y más rápido.
Según un estudio de Accenture, ocho de cada diez directivos de la industria de Defensa creen que la confianza es crucial para transformar la relación entre las personas y las tecnologías emergentes. Y que debe incorporarse al diseño y las experiencias. Un ejemplo de ello es el Plan de Acción de Transformación Digital del Ministerio de Defensa, cuya estrategia se convierte, con la aplicación de estas tecnologías, en hoja de ruta imprescindible para su renovación.
Tres estrategias
De estas estrategias, las dedicadas al cloud, el dato y la ciberseguridad cobran especial relevancia. En la primera, siguiendo esquemas de nube privada e híbrida, los sistemas de información ganan en robustez y resiliencia –en definitiva, en seguridad–, dando unas garantías de calidad de servicio, con costes controlados, desconocidas hasta ahora. Y asegurando, asimismo, la interoperabilidad con aliados y la OTAN.
Las Fuerzas Armadas reconocen que lo digital es fundamental para su misión, ya que impregna todo lo relativo a su operativa y estrategia
Según Accenture, el 84 por ciento de los líderes del sector de la Defensa confirmaron que sus organizaciones necesitan acelerar la transformación digital, poniendo a la nube en el centro para ser más ágiles y resistentes. Y el 74 por ciento de las organizaciones señala que disfrutan de una mejor protección de la seguridad con sus proveedores de nube que con cualquier solución que puedan
crear por sí solas.
La estrategia del dato, por otro lado, es la principal herramienta para obtener valor de la ingente cantidad de información distribuida en los sistemas de las grandes organizaciones. Evitar los silos de información y trabajar con el dato único es la base imprescindible para desplegar las técnicas de analítica avanzada, que permite nuevas visiones y mejora el conocimiento de la organización.
Otro elemento fundamental que vertebra la transformación digital en la Defensa es la ciberseguridad. Y en este caso concreto, la ciberdefensa. El ciberespacio confirma cada día su condición de quinto dominio, tanto con operaciones propias como apoyando operaciones conjuntas y combinadas en las que es necesario desarrollar capacidades nacionales que aseguren una autonomía estratégica desde el punto de vista tecnológico y operacional. El adiestramiento en cíber y las nuevas capacidades de ciberconciencia situacional, seguridad activa y gestión dinámica del riesgo son prioridades a desarrollar para conseguir una suficiencia de medios en esta área estratégica.
Eficiencia y seguridad
Este viaje de transformación digital se extiende a las operaciones militares y las nuevas capacidades que apoyan a las Fuerzas Armadas en todas sus remificaciones, como en las áreas de Mando y Control y Comunicaciones (C4I), Inteligencia y Vigilancia o la Identificación de Objetivos y Reconocimiento (ISTAR). Hay que alcanzar un puesto de mando digital, como elemento centralizador de la planificación y toma de decisiones, y en el que las tecnologías disruptivas (como las burbujas tácticas 5G de apoyo al despliegue, la Inteligencia Artificial aplicada a la planificación y el desarrollo de la misión, el procesado automatizado de imágenes o la vigilancia mediante drones) complementen y mejoren sustancialmente a las herramientas de apoyo ya disponibles.
La Fuerza 35 impulsada desde Tierra, o las tecnologías innovadoras alrededor de la F110 de la Armada y el sistema NGWS/FCAS en Aire, caminan en esta dirección, que potencia los sistemas de información y la interconexión de sistemas para conseguir operaciones y despliegues más eficientes y seguros.
Aliado estratégico
Accenture tiene una contribución importante en programas de los ministerios y departamentos de Defensa y Fuerzas Armadas de países como Alemania, Australia, EEUU y Reino Unido. Entendemos el impacto que las nuevas tecnologías tienen en las operaciones militares. Y por ello somos un aliado estratégico para la transformación digital de la Defensa en los países más relevantes del mundo.
Si cumplir la misión en cualquier actividad es importante, en el ámbito de la Defensa se torna crucial.
Es por esto que en Accenture nos sentimos orgullosos de ser actores relevantes en la transformación de las capacidades de las organizaciones de Defensa en todo el mundo. Y de ayudarles a conseguir superioridad en los modernos escenarios de confrontación y la máxima efectividad en sus operaciones militares.