La protección de infraestructuras críticas es uno de los principales retos de la videovigilancia en la actualidad. Examinemos en este sentido las principales aplicaciones en un campo específico: los puertos.
Más de 56 millones de pasajeros y de 500 millones de toneladas de mercancías pasaron por los puertos españoles en 2016 (Anuario Estadístico del Sistema Portuario Estatal).
El sistema de Puertos del Estado se compone de 48 puertos organizados en 28 Autoridades Portuarias. Hasta 15 de esas Autoridades Portuarias han gestionado más de 15 millones de toneladas de mercancía, destacando la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras, con más de 103 millones de toneladas. Además de estas cantidades, son importantes los 15 millones de teus (el tamaño estándar de un volumen de contenedor, que corresponde a unos 40 metros cúbicos aproximadamente) que pasan por ellos.
Por lo tanto, está clara la importancia estratégica de los puertos y de los terminales portuarios, sobre todo en un país como España, que está rodeado por el mar. Esta situación expone a estas instalaciones a diferentes amenazas desde el punto de vista de la seguridad y del mantenimiento de sus operaciones. Por lo tanto, se trata, en efecto, de infraestructuras reales y críticas.
Retos
El sector de la Seguridad debe hacer frente a tres retos destacados que presentan las infraestructuras críticas: proteger las estructuras, mantener la eficiencia de los procesos que tienen lugar allí y garantizar la seguridad de las personas que trabajan en estas instalaciones.
Gracias a la tecnología de Axis es posible conseguir estos objetivos con una única solución que, con el uso de dispositivos integrados, puede analizar el contexto, recopilar datos útiles para valorar lo que ocurre y activar medidas de seguridad, además de encargarse de su gestión y mantenimiento.
Así, la protección perimetral es el primer anillo de defensa en una infraestructura. Tradicionalmente se utilizan dos métodos que pueden usarse conjuntamente o uno como alternativa del otro: sistemas de videovigilancia y sistemas contra intrusos basados en sensores de presencia y movimiento.
De hecho, una alternativa válida en la actualidad puede ser otra: el uso conjunto de cámaras ópticas y térmicas con análisis de vídeo incorporado, ya que pueden representar un punto de unión entre la videovigilancia y la detección de intrusos.
El uso de un sistema de defensa perimetral con cámaras ópticas y térmicas, con la ayuda de soluciones disuasorias basadas en audio, también permite a los operadores de una sala de control ver lo que ocurre en una zona y, en caso de intento de intrusión real o posible, ordenar o solicitar algo a visitantes o personas no autorizadas. Al mismo tiempo, las alarmas generadas por análisis de vídeo se pueden enviar directamente a los sistemas de recepción y monitorización de alarmas.
Áreas internas
El segundo anillo de defensa es la monitorización de las zonas dentro de las instalaciones: en zonas tan amplias el reto es lograr al mismo tiempo una visión general y una unidad.
Para conseguir este objetivo podemos sugerir el uso de cámaras con múltiples sensores para obtener el contexto y las prestaciones PTZ detalladas. Para lo primero, la posibilidad para capturar tomas panorámicas sin interrupción con extraordinario detalle y mínima distorsión permite obtener una visión general y monitorizar lo que ocurre en los eventos. Para lo segundo, se facilita la captura de detalles en alta resolución, incluso en luz complicada o en entornos oscuros.
También tiene una gran importancia el uso de dispositivos con radares inteligentes, que con sus prestaciones específicas, permiten abarcar áreas amplias para monitorizar la actividad incluso cuando la visualización de la cámara no sea muy efectiva. La integración con prestaciones PTZ, automatizando su movimiento y encuadres, puede ser un gran apoyo para mejorar la eficiencia del sistema y de los operadores encargados de la seguridad.
Control de acceso eficiente
Otra zona de interés especial para puertas y terminales portuarios son los sistemas de control de acceso para conductores, visitantes y usuarios de las infraestructuras.
Con las soluciones de Axis, además de los sistemas tradicionales de autenticación –lectores de placas, teclados numéricos y soluciones biométricas– podemos ofrecer otros métodos de reconocimiento, como la lectura de matrículas, códigos QR y reconocimiento facial. Asimismo, la tecnología ACAP permite el acceso de personal según tenga o no equipo de protección personal.
Control de bienes peligrosos
Además de la protección perimetral, el uso de sensores inteligentes es también útil para la seguridad. Para evitar accidentes y daños de los bienes, una cámara termográfica puede generar una alarma si una zona o un objeto específico cambian su temperatura en un rango predeterminado, permitiendo monitorizar el riesgo de inflamabilidad, la autocombustión o una pérdida de gas. Las aplicaciones de termografía en infraestructuras críticas y entornos industriales son muy numerosas y se merecen un estudio específico.
Ciberseguridad
El diseño de un ecosistema de videovigilancia integrado nos permite poner de manifiesto la importancia de la colaboración entre todas las partes involucradas (productores, distribuidores y compañías encargadas de la gestión de infraestructuras).
Axis cree en el concepto de la protección en múltiples capas, por lo que para cada infraestructura crítica presentamos una nueva dimensión de la protección: la necesaria para hacer frente a los ciberataques potenciales. Esto requiere el uso de herramientas para la optimización y la mejora de eficiencia de nuestras redes, vigilando la seguridad y la calidad de las certificaciones de los dispositivos que conectamos a nuestras redes y servicios. En un software abierto y compartido, la calidad de las certificaciones y las actualizaciones frecuentes son las primeras garantías para evitar interferencias, incluso las producidas por medios digitales.
Marco legal
En España, la protección de infraestructuras críticas se encuentra sujeta a una serie de normativas y obligaciones legales ligadas principalmente a las leyes de privacidad (Reglamento General de Protección de Datos), el Plan Nacional de Protección de las Infraestructuras Críticas desarrollado por el CNPIC (Centro Nacional de Protección de Infraestructuras y Ciberseguridad), la Ley de Seguridad Nacional, la Ley de Seguridad Privada, la Ley del Sistema Nacional de Protección Civil, la Estrategia Nacional de Ciberseguridad y la adaptación de las correspondientes directivas europeas.
En concreto, en el subsector marítimo, encontramos la Ley de Puertos del Estado y Marina Mercante, el Real Decreto de 2007 de Protección de Puertos, el Reglamento sobre Manipulación y Almacenamiento de Mercancías Peligrosas en los Puertos y la Estrategia de Seguridad Marítima Nacional.
Ahora nos encontramos en una situación en la que los productos, tanto en términos de las aplicaciones como en las posibilidades de uso, se encuentran regulados; pero dentro de un sistema que, en general, aún muestra grandes vacíos normativos que se deberían llenar para hacer más armoniosa la colaboración dentro del sector y la efectividad de las soluciones para videoseguridad.