Los vemos en películas y series como personajes cuyo trabajo parece interesante y misterioso. Tal vez los relacionemos con Sherlock Holmes sentado ante un mapa en su oficina, tratando de descifrar la pista de un presunto delincuente. Esto se puede asemejar a la realidad, pero de hecho se trata de una profesión más serio y complejo.
Primeramente conviene explicar que un detective privado es un profesional cuyos clientes son particulares, empresas o aseguradoras que requieren investigar actos de terceros. El objetivo más común es el de aportar datos o pruebas a las personas o entidades que le contratan y, en caso de que fuese necesario, ratificar dicha información ante el tribunal o las autoridades competentes.
En España, la profesión de detective privado esta regulada por la Ley 5/2014 de 4 abril de Seguridad Privada, que exige un grado universitario de investigación privada o un curso oficial (reconocido por el Ministerio del Interior) de investigación privada para poder ejercer.
¿Qué necesitas para ser detective privado?
Aunque lo hemos mencionado en anteriores ocasiones, está bien volver a recordar los requisitos que necesita reunir una persona para desempeñar este trabajo.
- Ser español o ciudadano de la UE.
- Tener más de 18 años.
- Contar con una capacidad física y psicológica aptas.
- Poseer un título de grado en el sector de la investigación privada o un curso oficial de investigación privada.
- Carecer de antecedentes penales y no haber sido sancionado en los dos o cuatros años anteriores por infracción grave o muy grave.
- No haber sido apartado del servicio en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado o Fuerzas Armadas en los dos años anteriores.
- No haber sido condenado por intromisión a determinados derechos fundamentales en los dos años anteriores.
- Superar las pruebas que acrediten los conocimientos y capacidad necesarios para el ejercicio de sus funciones.
Mujeres detectives
Las mujeres en la seguridad cuentan con una presencia escasa en comparación con la masculina y el sector de la investigación privada no es una excepción. De hecho, en esta profesión las mujeres solo representan el 30% de los profesionales activos.
Por ello, existe la Asociación Nacional de Mujeres Detectives Privados, una entidad profesional y sin fines de lucro, cuya intención es dar visibilidad a las mujeres detectives y situarlas en la plataforma de las mujeres profesionales del siglo XXI.
La investigación privada y el Covid-19
Recordemos que durante el confinamiento pandémico, el Estado de Alarma no permitía que gran parte de las personas trabajadoras desarrollasen su actividad laboral porque no podían salir de sus casas. No obstante a ello, el sector de la investigación privada reclamó al Gobierno el derecho de poder ejercer su actividad mientras duró la ‘cuarentena’.
Esto debido a que la posibilidad de teletrabajo no encajaba con las funciones de un detective y consideraban que el no poder trabajar en la vía pública no permitía realizar investigaciones en favor de resolver y denunciar delitos perseguibles que ayudasen a defender a la ciudadanía.
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