Los videoporteros ofrecen un mecanismo cómodo para gestionar la protección de tus instalaciones, ya que combinan comunicación, videovigilancia y control remoto de las entradas en un único dispositivo. Esto los convierte en un complemento perfecto para tu solución de vigilancia.
Teniendo en cuenta esto, este artículo examina más profundamente los beneficios que proporcionan los videoporteros en red de interfaces abiertos, los cuales son:
1. Mejora del rendimiento de vídeo y audio: los videoporteros amplían las prestaciones de tu sistema de seguridad, incrementan la protección del personal y mantienen seguras las instalaciones. Además de esto, también puedes ahorrar costes con el aumento del control y de la eficiencia a la hora de gestionar la seguridad de tus visitantes.
Con el uso de cámaras de gran calidad para seguridad basadas en red con tu sistema de acceso, puedes garantizar la máxima calidad de imagen en cualquier condición, facilitando la identificación remota de los visitantes y proporcionándoles acceso a las instalaciones. Prestaciones como el amplio rango dinámico y unos magníficos resultados en lugares con escasa luminosidad garantizan una asombrosa calidad de imagen en cualquier entorno, incluyendo ambientes oscuros o situaciones con fuerte luz de fondo. Asimismo, la tecnología para la reducción de ruido en la imagen garantiza una comunicación fiable con los visitantes, algo muy valioso en exteriores.
2. Habilitador de nuevas soluciones adaptadas a las necesidades de la seguridad: los productos basados en estándares abiertos y ampliamente adoptados –como SIP para comunicaciones u Onvif y Vapix para videovigilancia–, permiten obtener el máximo aprovechamiento de los sistemas que ya tienes instalados y que ya conoces, propiciando ahora disfrutar de más prestaciones.
Los videoporteros amplían las prestaciones del sistema de seguridad, incrementan la protección del personal y mantienen seguras las instalaciones
Los estándares abiertos posibilitan conectar de forma sencilla cualquier sistema moderno de gestión de vídeo para ocuparte desde un único lugar de las grabaciones, los calendarios, el almacenamiento, las alarmas y las notificaciones. Las llamadas de los visitantes se pueden recibir directamente en el VMS a través de los sistemas telefónicos IP utilizados en toda la empresa o como una llamada independiente a un teléfono de sobremesa o a un dispositivo móvil específico. Esto los convierte en unas herramientas valiosas para la videovigilancia, comunicación y gestión de visitantes. Todo ello, en un único lugar.
3. Escalabilidad: ocupándonos de las necesidades actuales para prepararnos para el futuro: con un sistema basado en estándares e interfaces abiertos también se proporciona más libertad y flexibilidad, ya que no te limita a un sistema propietario. Esto significa que no te cierra las posibilidades cuando necesites cambiar en el futuro. Por ejemplo, si tu compañía crece o cambian las necesidades de seguridad, puedes garantizar que la parte esencial del sistema mejore sin necesidad de cambiar los productos que ya tienes en tus instalaciones.
Lo mismo ocurre para las soluciones de comunicaciones que pueden ir desde un único teléfono de sobremesa que recibe llamadas de visitantes a un sistema corporativo de comunicaciones de nivel empresarial que se ocupa de las llamadas desde todas las partes del mundo.
La misma escalabilidad también se aplica al número de videoporteros. En sistemas basados en red no hay un panel de control centralizado que limite la cantidad de videoporteros que puedes añadir, y el sistema facilita el crecimiento en tu organización. Independientemente de si te encuentras en el mismo edificio o si te expandes a nuevos emplazamientos, puedes usar una infraestructura de red estándar.
Las API y los SDK disponibles de forma abierta te permiten adaptar tu sistema para cualquier solución o integración específicas para satisfacer así tus necesidades.
4. Inteligencia en la periferia de la red. Unas operaciones más inteligentes y un mayor control: con la incorporación de inteligencia, los videoporteros se convierten en unas herramientas de seguridad más potentes porque pueden activar alarmas, llamadas, alertas, grabaciones de la cámara o mensajes emitidos sobre seguridad pública basándose en lo que esté ocurriendo en la escena y en tiempo real.
Este tipo de solución de seguridad activada por eventos elimina las cargas para los operadores y mejora la precisión y la eficiencia de las operaciones diarias. El videoportero se encarga de llamar la atención cuando un operador necesite poner en marcha algún tipo de acción, o incluso puede realizar acciones automáticas definidas previamente en ciertas situaciones planificadas y determinadas por el propietario del sistema.
Por ejemplo, los análisis de audio se pueden usar para detectar un disparo, un cristal que se parte o las primeras etapas de una pelea para enviar una alerta a seguridad. Entre otras cosas, los análisis de audio se pueden usar para detectar movimiento o el merodeo en áreas restringidas, la exploración de códigos QR para activar acciones predefinidas o reconocimiento facial para la identificación.
Con la incorporación de inteligencia, los videoporteros se convierten en unas herramientas de seguridad más potentes
Todas las actividades en las áreas de alrededor se pueden documentar con precisión junto a otros vídeos de seguridad y eventos, proporcionando un control completo y trazabilidad para el personal de seguridad. Con estas prestaciones, los dispositivos para videocomunicación en red se transforman desde unas herramientas aisladas en unos elementos intrínsecos y proactivos de un sistema de seguridad en red.
Todas estas prestaciones aumentan su importancia cuando hablamos de la creciente automatización de muchas compañías, algo que genera una reducción del personal en las instalaciones. Un ejemplo de ello lo vemos en 24 Storage, una compañía de autoalmacenamiento que necesitó un sistema de seguridad fiable y basado en IP para usarlo en numerosos lugares al mismo tiempo. Para mantener seguro el almacenamiento y controlar quién entra en las instalaciones, la empresa eligió un sistema con cámaras, soluciones de audio y un control de acceso remoto.
5. Menos costes totales y una instalación sencilla y rentable: los videoporteros usan cables de red y conectores estándar que ya se encuentran disponibles en el edificio, por lo que no hay necesidad de utilizar cableado propietario, caro y especial.
Asimismo, con la alimentación a través de Ethernet (Power over Ethernet, PoE), solo necesitan un cable de red estándar para la alimentación y transmisión de datos. También son instalaciones de bajo voltaje que no requieren personal experto para su instalación.
La elección de un videoportero basado en estándares abiertos permite reducir también el número de dispositivos fuera y dentro de la puerta de acceso. En el exterior, los videoporteros funcionan como cámaras de seguridad, telefonillos en las puertas y lectores de control de acceso, reduciendo la necesidad de contar con diferentes dispositivos y sin pérdida de rendimiento del sistema.
Además de esto, un videoportero basado en estándares abiertos se adapta y usa el equipo que ya tienes, sin necesidad de tener un panel de control o una unidad para ocuparse de las llamadas. De esta forma, se reducen las inversiones iniciales y el número de dispositivos necesarios para utilizar y mantener en el futuro.
Para concluir, debemos examinar varias razones para considerar la instalación de un videoportero en red. En primer lugar, ofrecen prestaciones tres en uno, combinando videovigilancia, comunicación y control de entrada, para ofrecer el máximo rendimiento a tu sistema de seguridad. Además, sus interfaces abiertas y su inteligencia proporcionan una herramienta para crear soluciones potentes, escalables y rentables para proteger tus instalaciones tanto ahora como en el futuro.