Sixperience es el nombre genérico del sistema basado en realidad virtual destinado a la operación y el mantenimiento industrial de la empresa TSK, en el que han integrado las cámaras Mobotix como un elemento más con el que interactuar. De este modo, la solución permite visualizar, tocar e interactuar con las cámaras en entornos virtuales conectados a Internet, generando así multitud de posibilidades dentro de la realidad virtual.
Gracias a la realidad virtual, TSK puede controlar un robot desde el que las cámaras Mobotix proporcionan una visión del mundo real e información del entorno, permitiendo a su usuario realizar operaciones de manera segura. Esto significa que el robot puede tripularse a distancia e incluso permitir al operador ver lo que hay a su alrededor cuando las cámaras de la firma alemana están embebidas.
Otra de sus muchas aplicaciones de esta solución es consultar todas las cámaras de seguridad de las instalaciones de manera eficiente gracias a la virtualización del propio edificio junto con toda la información proveniente de la sensórica y los sistemas de control del mismo.
«Un operador que quiera seguir la ruta de un sospechoso, podría seleccionar las cámaras por las que está pasando la persona sin tener que buscar la correcta, sin tener que recordar el nombre y la posición de cada cámara y contextualizando todo lo que ocurre con datos referentes a la presencia de trabajadores o luminosidad del entorno», explica Jairo Ramírez Ávila, ingeniero de visión artificial de TSK.
En el caso de la solución aplicada al CCTV de un edificio, ofrece al usuario más información que el canal habitual, sobre todo, gracias a la contextualización de cada cámara en el espacio que está viendo.
La integración fue bastante rápida, no superó los tres meses y fue un éxito gracias a las posibilidades de configuración y acceso a datos que ofrecen las cámaras Mobotix. El punto crítico aquí era la latencia, pero se consiguieron buenos resultados y se redujo al máximo para una experiencia sin problemas.
¿Por qué Mobotix?
Juan Luis Carús Candás, director de Innovación en TSK Electrónica y Electricidad, afirma que eligieron a Mobotix para su solución «por la gran personalización y configuración de la cámara, así como por las posibilidades que nos da su software y API HTTP». A lo que se suma otro factor importante: la durabilidad y resistencia de las cámaras, que garantizan buenos resultados incluso en los entornos más duros.
Durante los próximos meses, TSK seguirá trabajando en la integración de las cámaras en entornos de realidad virtual profundizando en el desarrollo de algoritmos embebidos que permitan la detección de eventos anómalos tanto mediante el uso de cámaras de espectro visible como termográfico. Además, trabajarán en la optimización de la latencia mediante el uso de tecnologías 5G que permitan alcanzar latencias por debajo de los 100 milisegundos.